La corporación de Rianxo aprobó el lunes en pleno un reconocimiento extrajudicial que asciende a más de 95.200 euros para pagar facturas pendientes con la abstención de todos los partidos de la oposición.
El dinero irá destinado a pagar a proveedores locales por diferentes servicios, siendo uno de los más elevados la cubierta del centro de salud de Taragoña, cuyo coste rondó los 14.000 euros. También se incluyen gastos para la antención de animales abandonados, obras de saneamiento, alumbrado, adquisición de maquinaria para las brigadas que trabajan en obras y caminos, así como gastos culturales.
El alcalde, Adolfo Muíños, afirmó que “a ninguén lle gustan os recoñecementos extraxudiciais” pero que sería “peor que as facturas pasasen a engordar os caixóns”. Desde el gobierno local también se apuntó que “é imposible que nun orzamento de 8 millóns de euros non veñan gastos imprevistos”. Muíños añadió que el Concello debe priorizar el pago de la deuda bancaria, lo que “non permite facer investimento novo” pese a que “temos diñeiro”.
La oposición optó por abstenerse en la votación. El portavoz de Rianxo en Común criticó la “gran desprevisión” del gobierno local y que “a maioría de facturas son do ano pasado”, con lo que se superan los 30 días de pago a proveedores fijados por ley. La concejala del PSOE, Carmen Figueiras, añadió que “deberiamos contar” con los gastos detallados y que “se hai problemas de persoal haberá que reforzar o departamento”. Por su parte, Adela Becerra, edil del PP, propuso la creación de un fondo propio para imprevistos y dio cuenta de un “desaxuste” de más de 2.000 euros en las facturas remitidas al partido y las del pleno.Por otro lado, todos los partidos votaron a favor de una modificación de 50.000 euros en un crédito de 500.000 que se invertirán en los centros escolares. l