La Guardia Civil ha detenido a seis personas e investiga a otra más en Asturias como presuntos integrantes de una banda dedicada a blanquear dinero del tráfico de drogas, más de un millón de euros en los últimos tres años, según el Instituto Armado, que solicitó el bloqueo de 16 cuentas y el precinto de 37 vehículos.
Se trata de la operación bautizada como “Metta”, a su vez derivada de una anterior conocida como “Matta”, contra el tráfico de estupefacientes, que en 2017 se centró en Asturias. Aquel golpe tuvo un fleco en Arousa, ya en 2018, con un arresto fugaz de Laureano Oubiña, que terminaría quedando en libertad, como investigado. Según trascendió ayer, dicho caso está todavía pendiente de que la Fiscalía termine de precisar el alcance de las acusaciones.
Dos investigaciones ligadas
En las actuaciones de 2017 en Asturias se habían decomisado 5 kilos de cocaína y otros 11 kilos de hachís, así como de 15 coches de alta gama y varias armas, con la detención de 17 personas, de las cuales doce ingresaron en prisión preventiva.
El arresto de Oubiña se produjo meses más tarde, ya en 2018. En el marco de las indagaciones en Asturias se había escuchado a uno de los investigados decir que había ido a ver a “Laureano”, aunque Oubiña circunscribió aquel contacto por motivos que nada tenían que ver con una red de droga, sino una conversación sobre la recomendación de un abogado para un tercero en común. De hecho, estuvo muy poco tiempo detenido: Pasó por dependencias de la Guardia Civil y en la misma mañana ya había sido puesto en libertad.
En todo caso, tras la “Matta” en 2017, la Guardia Civil inició otra investigación, sobre blanqueo de capitales, la conocida esta semana como operación “Metta”, que se centró durante más de dos años en recabar información del incremento patrimonial de los integrantes de una organización asturiana, ya que la mayoría de ellos ostentaba un alto nivel de vida, pero no trabajaba.
La investigación llevada a cabo por la Guardia Civil concluyó a mediados del mes de marzo de este año, pero como consecuencia de la declaración del estado de alarma, las detenciones no se pudieron llevar a cabo hasta el mes de mayo.
Los seis detenidos declinaron prestar declaración en sede policial, mientras que a una séptima persona le fue tomada manifestación en el Centro Penitenciario de Asturias, donde se encontraba recluido cumpliendo condena.
Como resultado del informe confeccionado por la Guardia Civil se pudo determinar que desde el año 2015 hasta noviembre de 2017, los miembros de la esta presunta organización habrían experimentado un incremento patrimonial de más de 1.100.000 euros, que sospechan pudo ser producto de una posible actividad ilícita de la venta de drogas. l