Si existe algo que levanta pasiones y genera dudas casi a partes iguales, eso es sin duda el tarot. Por un lado, hay gente que ve el tarot y todo lo relacionado con el mundo de la adivinación con muchos prejuicios y falsas creencias. Mientras que por otro lado, nos encontramos con todas aquellas personas que ya han descubierto por sí mismas todo lo que el tarot puede hacer por ellos y que se preguntan por qué no habían acudido antes a este tipo de servicios. Dos visiones muy distintas que en realidad reflejan el desconocimiento que sigue habiendo en la sociedad hacia el tarot, un arte centenario que lleva acompañando al hombre durante varios siglos y que desde el principio ha supuesto una gran ayuda con la que afrontar mejor nuestra vida y saber qué decisiones serán mejores para nuestro futuro.
De hecho, y fruto directo de este desconocimiento, es normal que surjan muchas dudas respecto al mundo del tarot. Por ejemplo, muchas personas piensan que el tarot solo sirve para saber qué nos deparará nuestro futuro amoroso y que simplemente necesitaremos tirar las cartas del amor para tener éxito en nuestras relaciones de pareja.
No obstante, las consultas que podemos hacer al tarot son mucho más amplias y abarcan todo tipo de áreas de nuestra vida como puede ser el trabajo, el amor, la familia, la fertilidad, etc. O incluso personas que buscan arrojar algo de luz en sus vidas en esos momentos donde vemos todo negro, donde el pesimismo se ha adueñado de nosotros y donde necesitamos un apoyo extra para poder seguir adelante.
Al fin y al cabo, el tarot en general y las tarotistas en particular buscan en todo momento ayudar a todos aquellos que acuden a su consulta. Incluso en los casos en los que las respuestas que arrojen las cartas no sean tan halagüeñas como esperábamos y por el contrario nos den malas noticias. Es más, es precisamente en esos momentos más difíciles donde veremos todo el potencial del tarot y toda la ayuda que nos pueden aportar las tarotistas, quienes gracias a sus dones y a su sensibilidad especial (sin duda alguna dos de las características más importantes a la hora de acudir a un buen profesional del tarot) conseguirán conectar con nosotros desde el primer minuto.
Y, lo que es más importante, conseguirán darnos las claves que tanto necesitamos para seguir andando nuestro camino, para continuar con nuestras vidas y para explotar al máximo todo lo que el destino ha pensado para nosotros. Un destino del que somos dueños en todo momento, un destino que escribimos nosotros mismos con nuestras acciones diarias y, en definitiva, un destino que será mucho más fácil de afrontar si contamos con todas las herramientas que pone a nuestra disposición un arte centenario como el tarot.
Por otro lado, y como ya hemos mencionado antes, a pesar de que muchas personas crean que el tarot es simplemente una manera de saber si esa persona que nos interesa será o no correspondida, a la hora de la verdad existen tantos tipos de consultas como tipo de personas que acuden al tarot.
Sin embargo, si tuviéramos que elegir las consultas más habituales de la población en general, sin duda serían las siguientes:
Finalmente, no debemos olvidarnos de que, independientemente de cuál sea la consulta que hagamos, debemos acudir con una mente abierta, sin prejuicios y con las ideas claras. Solo así conseguiremos las respuestas que buscamos.