ERC lanzó este lunes un ultimátum a JxCat para cerrar antes del 1 de mayo un acuerdo que permita investir a Pere Aragonés sin agotar el plazo límite del 26 de mayo, que conduciría a la convocatoria automática de nuevas elecciones en Cataluña.
Tras dos investiduras fallidas -por la abstención de JxCat- y viendo que tampoco será posible investir a Aragonés antes de la simbólica fecha de la Diada de Sant Jordi, el 23 de abril, ERC quiso escenificar este lunes la gravedad del momento.
Excepcionalmente, comparecieron en rueda de prensa los cuatro miembros de su equipo negociador -Sergi Sabriá, Marta Vilalta, Josep Maria Jové y Laura Vilagrá- para apremiar a JxCat.
"El país no puede esperar más, este bloqueo no puede continuar. Si hoy no hay acuerdo ni tampoco hay Govern no es por ERC, las excusas se tienen que acabar. La gente de este país no puede seguir esperando en función de debates y desavenencias que ni son del país ni son de ERC, son internas de partido", advirtió Sabriá, en un tono contundente inédito en las últimas semanas de negociaciones.
Según Sabriá, "no hay escollos" que impidan pactar, por lo que ERC "no entendería que entre Sant Jordi y el 1 de mayo este acuerdo no se materializase" sin más "excusas ni dilaciones", porque "la paciencia de la gente está al límite".
La urgencia que muestra ERC para investir cuanto antes a Aragonés, más de dos meses después de las elecciones del 14-F, está chocando con el ritmo negociador que impone JxCat, que exige un acuerdo lo más detallado posible.
Artadi exigió a ERC "prudencia" y "respeto" y ha aludido a los "flecos" que afectan al ámbito de la coordinación independentista, temas "programáticos" y aspectos relativos al diseño del Govern.
"Queremos más detalle, saber qué tiene que hacer el Govern en cada uno de los ámbitos que son importantes, desde la vivienda hasta la seguridad, antes de cerrar hacia dónde vamos. Porque cuando haces una investidura le das confianza a la persona que se presenta y también a su plan de gobierno", explicó.
Un elemento que puede entorpecer las negociaciones de investidura es el protocolo difundido por los Mossos d'Esquadra para el uso de los proyectiles de precisión o foam, que obliga a apuntar por debajo del abdomen, sin aviso previo ante situaciones violentas y sin autorización del mando policial en casos de "peligro muy grave".
La CUP exigió la "prohibición inmediata" de las balas de foam y pidió "responsabilidades" al conseller de Interior, Miquel Sámper (JxCat), por publicar el protocolo.
La portavoz del PSC, Eva Granados, avisó que la dilación en las negociaciones pone en peligro la aprobación de unos presupuestos de la Generalitat para 2021, que en su opinión son más necesarios que nunca para hacer frente a la crisis del covid".
El portavoz de Catalunya en Comú, Joan Mena, tachó de "escándalo" las ayudas por 2,6 millones de euros para la promoción industrial que la Generalitat ha concedido a los gimnasios DIR, compañía "vinculada" a JxCat, por lo considera "razonable" pensar que ha habido "trato de favor".
El presidente de Ciudadanos en el Parlament, Carlos Carrizosa, advirtió de los efectos para la economía catalana de la "parálisis" que vive la Generalitat al estar con un Govern en funciones y que paralizaría, entre otros asuntos, la gestión de los fondos europeos.