El candidato de ERC a la presidencia de la Generalitat, Pere Aragonès, ha anunciado este sábado su intención de constituir un Govern en solitario en Cataluña ante la imposibilidad de alcanzar un acuerdo con JxCat, que le ha respondido con la mano tendida para seguir negociando una coalición.
Tras 83 días de negociaciones infructuosas para formar Govern, este sábado Pere Aragonès ha sostenido que la distancia entre ambas formaciones "sigue siendo demasiado grande" y que no existen las bases "para que un Govern de ERC y JxCat sea un Govern fuerte y cohesionado".
El anuncio de Aragonès llega justo un día después de que el secretario general de JxCat, Jordi Sànchez, diera por hecho que su partido y ERC podrán alcanzar un acuerdo de gobierno "en los próximos días", ya que, según dijo, las conversaciones "avanzan satisfactoriamente" y quedan "pequeños flecos que no representan ningún obstáculo importante".
Ante la inminencia de este acuerdo, ERC emplazó a JxCat, sin éxito, a reunirse para cerrar el pacto y para calibrar si las expectativas avanzadas por Sànchez tenían fundamento.
Hoy, Aragonès ha dado un golpe encima de la mesa al plantear abiertamente por primera vez la opción de un Govern en solitario ante la "imposibilidad" de cerrar un acuerdo con Junts: "Después de 83 días de negociación, es evidente que los consensos necesarios no existen".
El candidato republicano ha explicado que Junts ha propuesto que el "Consell per la República", espacio parainstitucional que lidera desde Bélgica el expresident Carles Puigdemont se "reformule" y pase a ser quien decida, por ejemplo, "la relación del Gobierno con el Estado" en aspectos como la mesa de diálogo.
"Si en el principal tema de la agenda política de la última década en Cataluña, que es sobre el proceso de independencia, hay un órgano que le dice al Govern qué es lo que tiene que hacer y lo que no tiene que hacer, esto es una tutela. El presidente de la Generalitat no es un gerente, no es un administrador", ha aseverado Aragonès.
Después de expresar su voluntad de emprender un Govern en solitario, Aragonès ha anunciado que iniciará contactos "en las próximas horas" con JxCat, la CUP y los comunes para abordar un debate de investidura "lo antes posible".
"Junts ha puesto encima de la mesa la posibilidad y el compromiso de dar apoyo a la investidura de un gobierno en minoría y evitar la repetición electoral. Asumimos claramente esta opción para desencallar las negociaciones", ha señalado.
El anuncio de Aragonès ha cogido por "sorpresa" a JxCat, según ha dicho el propio secretario general del partido, Jordi Sànchez, que ha intervenido en la clausura del congreso extraordinario que ha celebrado la formación este sábado y en el que Anna Erra y Josep Pagès han sido elegidos como presidenta del Consell Nacional y defensor del afiliado, respectivamente.
Al aviso de Aragonès ha respondido Sànchez con la mano tendida para seguir negociando para cerrar una coalición, y ha puesto encima de la mesa el voto de cuatro diputados de JxCat para facilitar la investidura del candidato de ERC si los republicanos consiguen cerrar un pacto con la CUP y los comunes.
"A pesar de esto, continuamos abiertos a dialogar para crear este Govern", ha insistido el secretario general de Junts, que ya se abrió ayer en una rueda de prensa a un gobierno en solitario.
Sànchez ha negado, asimismo, que desde JxCat se haya planteado ninguna "tutela" a ERC: "JxCat ha dejado bien claro desde el primer momento, y lo hemos dejado por escrito, que el Govern de la Generalitat no podía ser tutelado por nadie, que el Govern de Cataluña tenía que liderar no solo una recuperación económica y social, sino también una estrategia independentista".
En el congreso telemático de JxCat también ha intervenido el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont, que ha advertido que su formación no se dejará "pisar" ni que le falten al respeto.
"Hoy sabemos con más claridad que nunca que la independencia de Cataluña necesita que Junts exista y Junts sea relevante, sea fuerte, sea decisiva", ha afirmado Puigdemont.
El anuncio de Aragonès ha generado reacciones en la práctica totalidad de los partidos con representación en el Parlament.
El líder del PSC en la cámara catalana, Salvador Illa, considera que la propuesta de Aragonès constituye "un nuevo fracaso" y le ha invitado a apartarse para dejar paso a su candidatura.
"Señor Aragonès, un nuevo fracaso. Señor Aragonès, hágase a un lado. Señor Aragonès, acepte la realidad y deje que haya en Cataluña un Govern de servidores públicos de izquierdas", ha exclamado el exministro de Sanidad.
Desde los comunes, su jefa de filas en el Parlament, Jéssica Albiach, ha pedido a Aragonès que explore un Govern "de transformación y progresista" sin el apoyo de JxCat, pues consideran que acabarían imponiendo sus tesis aunque sea desde "fuera".
El presidente del grupo de Cs en el Parlament, Carlos Carrizosa, ha asegurado que un gobierno de los republicanos en solitario sería "como saltar de la sartén a las brasas".
Y el líder de Units per Avançar, Ramon Espadaler, que es diputado en el Parlament dentro del grupo del PSC, ha apuntado que ERC y JxCat han inaugurado "solemnemente" la fase de culparse mutuamente del "fracaso" en su negociación tras el 14F.