Sanxenxo está ultimando los detalles de la temporada de verano y con la previsión de recibir a más visitantes que el año pasado, al relajarse la incidencia de la pandemia. Para ello contará con el habitual refuerzo de la Guardia Civil, que este año sumará 4 agentes a los 10 habituales para el mes con mayor afluencia turística, agosto. Además, Tráfico tendrá una presencia especialmente frecuente en sus carreteras. Y a esto se añaden los 31 auxiliares de Policía Local que se incorporarán esta semana.
Estos asuntos fueron abordados ayer en la junta local de seguridad habitual antes de estas fechas. La subdelegación de gobierno, el Concello y la Guardia Civil y la Policía Local abordaron los retos de la temporada, pero también los más inmediatos como el Rallye de Pontevedra “Memorial Miguel Álvarez” de este fin de semana, el primero que se celebra tras un año de pandemia. De hecho, el alcalde, Telmo Martín, reconoció que les “preocupa” ante posibles aglomeraciones de gente en el municipio, la salida será el viernes desde la Praza do Mar y una de las pruebas se desarrollará en el polígono. Es por ello que ayer se reunió nuevamente con la organización para darle su “apoio”, pero también para pedirle “prudencia e responsabilidade”, cosa que también hizo la subdelegada de gobierno, Maica Larriba. Hay más de 200 inscritos y la Guardia Civil desplegará 60 agentes por tierra y aire, mientras que la Policía Local también tendrá refuerzo.
Respecto al verano, el coronel Simón Venzal señaló que 10 agentes se sumarán a la plantilla del puesto de Sanxenxo a partir del 1 de julio y otros cuatro en torno a agosto, aumentando el número con respecto a años anteriores. El jefe de la Comandancia de Pontevedra también explicó que el motivo no es otro que garantizar la seguridad en “un destino turístico con un increíble aumento de la población en verano y que fluctúa”.
Larriba añadió que es una villa “tranquila e segura” con una “baixa incidencia da criminalidade”. De hecho, en los cinco primeros meses del año experimentó un descenso en hurtos y robos en comparación con el mismo periodo de 2020, pero no de manera tan acusada como en el resto de la provincia y se mantiene por encima de la media. La subdelegada vinculó esta “caída máis moderada” a que es un “concello de gran afluencia de turismo que se mantivo durante todo o ano pasado a pesar da crise sanitaria.
Además crecieron los delitos de estafas y pequeños daños –el resto bajaron–, así como los relacionados con la ciberdelincuencia, pero dentro de la tendencia general ante el aumento de las compras por internet. De hecho, Sanxenxo cuenta con un equipo especializado en estos delitos y prevé poner en marcha una campaña de sensibilización. En general, el puesto tiene un índice de esclarecimiento del 42 %.
Durante la junta también se acordó apagar el semáforo de As Salinas entre el 1 de julio y el 31 de agosto, por petición de Tráfico, para dar mayor fluidez. Y posteriormente hubo un minuto de silencio por los últimos casos de violencia vicaria y de género. Además de los últimos “dramáticos”, con la niña de Tenerife y la joven de 17 años de Sevilla, la subdelegada indicó que julio fue “especialmente tráxico” con cuatro asesinadas y ya son 18 en lo que va de año. También recordó que desde 2013, 44 niños han sido asesinados. En la provincia, a día de hoy, hay 1.170 casos activos en el Viogén, de los cuales 22 son de riesgo alto, y solo del 10 al 14 de junio se contabilizaron 18 nuevos y nueve son de riesgo alto.