La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha admitido que el Gobierno de coalición se encuentra en un momento “delicado” a raíz de las discrepancias surgidas alrededor de la controvertida reforma laboral.
En todo caso, en declaraciones a los medios tras un acto en Santiago de Compostela, la vicepresidenta ha insistido en que las diferencias entre los socios de Gobierno a este respecto “no van de quién lidera” la negociación y sí “de qué vamos a hacer en la principal reforma de mercado de trabajo de nuestro país”.
“Nunca discuto los puestos, tanto es así que en esa pelea que hubo entre ser vicepresidenta segunda o tercera, yo tardé cinco minutos en renunciar a esto”, ha esgrimido Díaz, que ha remarcado que el debate “es de contenidos y no de personas”.
Sobre este particular, ha reiterado que lo que está sustanciándose en el seno del Gobierno "es un debate sobre los contenidos de la reforma laboral”, pese a que el pasado año se cerró un acuerdo en el que ambos socios optaban por derogar la legislación laboral del PP.
Sin embargo, “hay una parte del Gobierno que sigue discutiendo los contenidos” pese a que “afrontar la reforma laboral que necesitamos” es un objetivo prioritario para el país ya que mantener la legislación actual supone “seguir manteniendo la precariedad” en España, bajo su criterio.
Visto el calado del debate, en opinión de Díaz “sería bueno que en la otra parte del Gobierno se aclaren porque están dando declaraciones diferentes” a este respecto.
Además, ha considerado que las discrepancias que se están dando sobre la reforma laboral se asemejan a lo que sucedió en su día con las negociaciones para subir el salario mínimo interprofesional (SMI) donde también se reflejó que hay una parte del Ejecutivo que “no quiere que se cambien las relaciones laborales” existentes en España.
Así las cosas, Díaz ha asegurado que se mantiene la relación de colaboración entre todos los ministerios que conforman el Gobierno: “Estamos colaborando todo el día” y, en su caso concreto, “con todos los ministerios y ministros”.
Ha proclamado por tanto su convicción plena sobre el futuro de la coalición en tanto que su “compromiso con el Gobierno de España y con la coalición es personal y ético”, por lo que seguirá “defendiendo este Gobierno progresista”.
Los socios del Gobierno de coalición se reunirán esta tarde en la mesa de seguimiento del Acuerdo gubernamental entre PSOE y Unidas Podemos (UP) para intentar reconducir la situación después de la crisis abierta por la reforma laboral, ante lo que Díaz espera, “como siempre, trabajo serio y riguroso”.
La vicepresidenta segunda del Gobierno ha deseado "la mejor de las suertes" al ya exdiputado de Unidas Podemos Alberto Rodríguez, para defender su escaño ante la "injusticia" de que la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, decidiese retirárselo después de que el Tribunal Supremo le condenase a una pena que acarreaba inhabilitación.
Además, ha enviado a Rodríguez "afectuosamente" todo su "cariño". "Somos amigos. Lo quiero mucho, más allá de compartir espacio político", ha recalcado la vicepresidenta segunda.
Así lo ha manifestado al ser preguntada al respecto por los medios después de la inauguración del foro 'Diálogo sobre el futuro del envejecimiento' en el Centro Obra Social Abanca de Santiago de Compostela.
Se trata de un evento en el que colaboran diferentes instituciones, entre ellas el Gobierno de España, el Ayuntamiento y el Parlamento Europeo.
La polémica en torno a la retirada del escaño provocó que Rodríguez anunciase la presentación de una querella contra la presidenta del Congreso, aunque en las últimas horas ha descartado esta vía y ha optado por presentar recursos ante el Tribunal Constitucional contra la sentencia del Supremo y contra la decisión de Batet.