Caras largas ayer en la sede de la CIG en Vilagarcía. El largo conflicto de Thenaisie Provote ha llegado a su final, pero lo ha hecho de forma amarga para quienes han estado hasta el último momento peleando por la conservación del mayor número posible de puestos de trabajo.
El juzgado de lo mercantil en el que se dirimía su concurso emitió un auto el pasado día 21 cuyo contenido desveló este jueves la central nacionalista. El órgano judicial se decantó por la oferta presentada por Tomás Guillén, a quien se adjudica la maquinaria de las dos factorías. La oferta seleccionada se compromete solo a mantener 19 puestos de trabajo, 14 en O Grove y 5 en Mos. Los otros 120 empleados se van al paro. Ya se está negociando su ERE extintivo.
De las tres ofertas sobre la mesa, era la que menos empleos garantizaba, frente a los 71 que ofrecía Canet Inversiones y los 77 de Conservas Rías Baixas. Al final, lamentaron sindicato y trabajadores, pesó más la oferta económica: La ganadora de Tomás Guillén supera los tres millones de euros tras una mejora, frente a los 2,2 de Canet. Era, por tanto, la más apetecible para los acreedores, entre los que los bancos tienen crédito preferencial.
El futuro pasa por la “fe”
La propuesta de Tomás Guillén pasa ahora por formalizar la compra en el plazo de un mes, darse un año de margen con las plantas cerradas y realizar mientras una inversión de 2,4 millones de euros para actualizar maquinaria e instalaciones. La idea es reabrir entonces con esa plantilla reducida. Pero de esto, de todo más allá del mantenimiento de esos 19 empleos, no hay garantía alguna sobre el papel, advierte la CIG. Esperan que así sea, valoran la palabra del empresario, pero son conscientes de que es un acto de “fe”, al igual que la “certa preferencia” que los trabajadores ahora despedidos tendrán para una hipotética readmisión en el futuro, si la conservera se consolida, crece y ne cesita más mano de obra. Se duda de esto, porque el plan de negocio prevé especializar la marca en conservas delicatessen, productos para los que suele haber grupos de trabajo reducidos en la producción, tal y como les ilustra la experiencia.
La CIG recordó que su empeño fue la defensa siempre de las opciones que más empleos garantizaban, por eso Rosa Abuín valoraba ayer que “iso de que a ‘Historia xulgaranos’ coido que lle acae ben á situación”. Dan por cerrado el conflicto, pero estarán “vixiantes” de que se cumpla lo acordado. Todos los presentes ayer desean que las expectativas se cumplan y que Thenaisie crezca y se consolide, pero son conscientes de que en un año de parón se pierde mercado, que el empleo asegurado es poco y que el futuro es incierto.
La plantilla, “cansa e agobiada” lo tiene claro a la vista del resultado: “Houbo palabras bonitas, pero ao final, as institucións esquecéronse dos traballadores”.