No habrá que esperar a enero -como inicialmente se había anunciado- para que empiecen los trabajos de humanización de la segunda fase del paseo marítimo de Vilagarcía. El gobierno local acaba de confirmar que las obras para terminar una obra muy demandada se iniciarán en unos días. De esta forma el paseo estaría totalmente restaurado en primavera para el uso y disfrute de los ciudadanos.
Hace poco más de un mes el departamento de Costas confirmaba al alcalde de la ciudad, Alberto Varela, que ya se había iniciado el procedimiento para la contratación de los trabajos de esta esperada segunda fase. Cabe recordar que la actuación será financiada de forma íntegra por el organismo estatal y la previsión es que se inviertan en este tramo de los trabajos un total de 632.681 euros. La encargada de acometer la obra será la empresa pública Tragsa, que tendrá cuatro meses para finiquitarla. Con la inyección de esta importante cantidad para terminar la segunda fase de acondicionamiento la suma de la reparación total asciende a 1,3 millones de euros financiados íntegramente por el Estado. Los trabajos que se harán son iguales a los de la primera fase. Así pues se sustituirá el deteriorado pavimento de losetas de pizarra por uno de hormigón tintado más resistente, duradero y accesible. La obra también implica la renovación del cableado de electricidad y del alumbrado público en todo el tramo.
Las obras a iniciar afectarán concretamente al tramo central del paseo marítimo que va desde el Balneario de A Compostela hasta las inmediaciones del lavadero de Carril. La primera fase ya había contemplado la renovación del pavimento en los dos extremos del paseo. En principio, y según le han trasladado al Concello responsables de Costas, la intención es que los operarios empiecen a trabajar en el tramo más próximo a Carril para finalizar en la zona del Balneario.
No serán las últimas obras que, a priori, se ejecutarán en este espacio de la playa. Cabe recordar que la intención del gobierno local es dotar al paseo marítimo de un carril bici específico que discurra justo por el lado próximo a la arena. De esta forma se evitarían los conflictos que existen entre peatones y ciclistas en un espacio pensado más que nada para ir a pie. La ampliación del carril-bici (que existe en toda la zona portuaria de la TIR) permitiría unir toda la costa desde Vilaxoán hasta Carril con unas vías seguras y perfectamente señalizadas.
Esas obras nuevas se ejecutarían previsiblemente con los fondos Feder y supondrían un enlace también con las actuales ciclovías del centro.