Un gol de Dani Abalo en el minuto 89 dio la victoria al Portonovo ayer en el campo Iago Aspas ante el Moaña. Un triunfo por 1-2 muy necesario, y que se fraguó en un partido complicado para el equipo de Jose Vecoña.
A los seis minutos aparecieron los fantasmas que están acompañando a los arlequinados esta temporada. El Moaña marcó a la salida de un córner, con un remate de cabeza de Manu Ventín. A partir de ahí el Portonovo jugó con demasiados nervios, muy acelerado en ataque. Exigido por su mala dinámica de resultados y por verse por detrás en el marcadro ante el colista.
La primera parte no dio mucho de sí en cuanto a ocasiones. Al inicio de la segunda el Portonovo empató con un gol de penalti de Hugo Soto, que él mismo había provocado. El Portonovo dominó la segunda parte y merodeó una y otra vez el área del Moaña, pero falló en la toma de decisiones en la finalización. Cuando todo apuntaba a un nuevo pinchazo, apareció Abalo a la salida de un córner para marcar el tanto de la victoria que da oxígeno al equipo. Sin demasiado tiempo para digerir la alegría, el miércoles a las 21.15 horas recibe en Baltar al CJ Cambados en uno de los aplazados. Será el primero de los tres partidos pendientes que tienen los arlequinados que, cinco puntos por detrás de los amarillos, no tienen margen de error si quieren alcanzar el top 5.