A Jéssica Bouzas le tocó enfrentar el estreno de Varvara Grachova en el WTA 250 de Cleveland. La actual número 69 del mundo, según el ránking WTA, salió preparada para hacer un gran partido de estreno en dicho torneo, dominando sin ninguna duda en el comienzo del primer set. Bouzas parecía no tener opción luego de que la tenista francesa se pusiese con un 0-5 a su favor. 

La vilagarciana no encontraba la manera de darle la vuelta al partido, hasta que comenzó a aprovechar los primeros servicios y a mejorar en el saque, evitando así las dobles faltas, en las que la francesa tuvo más fallos. De este modo, Bouzas logró ponerse 4-5, provocando que Grachova tuviera que sacar su mejor versión para batirla. A pesar de que la arousana tuvo una notable mejoría con respecto al inicio del enfrentamiento, no pudo llevarse el primer set, que finalizó con un 4-6 a favor de la francesa. Al comienzo del segundo, y determinante, set, Bouzas comenzó más fuerte que su rival, controlando el saque y muy concentrada en el juego que planteaba Grachova. De hecho, logró vencer a la francesa en el primer juego.  

El enfrentamiento parecía igualarse cada vez más, Bouzas caía pero se volvía a levantar, mientras su rival se veía obligada a no perder la poca ventaja que arrastraba sobre la tenista arousana. En el segundo set, pareciera que entre ambas se estuvieran turnando los juegos, dejando un encuentro asombroso para los espectadores. Bouzas se puso por encima con un 4-2, un chute de energía y moral que impulsó a la arousana, dispuesta a forzar el tercer set. 

Finalmente, Bouzas lo logró, venciendo por 6-3 en un set en el que claramente fue superior. El tercer set comenzó igual de igualado que el segundo, aunque con la francesa más atenta a los detalles. Cleveland vivía un auténtico duelo de titanes, con una Jéssica Bouzas arrolladora que se volvió a poner por encima, batiendo las esperanzas de Grachova. De nuevo, Bouzas dejó a todos boquiabiertos, remontando el set con un 6-2 a su favor.