El Museo do Gravado de Ribeira acoge una muestra en la que, a través de los ojos de Manuel Cores, un fotógrafo aficionado, se recorre la vida de este municipio durante el primer tercio del siglo XX.
Las imágenes, llegadas a la actualidad de la mano de Daniel Bravo, nieto del artista e historiados, permiten a todos los visitantes viajar en el tiempo a Ribeira, un municipio que, ya en 1905 contaba con 25 fábricas de salga y ocho conserveras, por lo que era uno de los impulsores económicos de la comarca.
Bravo conservó los negativos en cristal de su abuelo para que, hoy en día, podamos conocer a través de imágenes el día a día de esta localidad. Fotografías de paisajes, retratos, ferias o edificios, comparten exposición con imágenes de vecinos divirtiéndose en actuaciones musicales o en partidos de fútbol.
Las representaciones que más llamaron la atención durante el acto inaugural de la muestra, que contó con la presencia del historiador Daniel Bravo, la concelleira de Cultura, Antía Alberte, el periodista Ciprián Rivas y el alcalde del municipio, Luis Antonio Pérez, fueron las de personas fallecidas, imágenes muy representativas de la época.
Desde el Concello invitan tanto a los vecinos de Ribeira como a los visitantes que durante estos meses de verano acuden a este municipio a conocer esta obra y, a través de las imágenes, conocer cómo era y cómo vivían los habitantes de este municipio a principios del siglo XX.