La Guardia Civil de Tráfico ha detectado el pasado domingo en la Autovía do Barbanza (AG-11), de Padrón a Ribeira, un coche que circulaba a 142 kilómetros por hora, siendo el límite genérico para este tipo de vías de 120, arrojando su conductor un resultado positivo en las pruebas de alcoholemia a las que fue sometido, además de que el automóvil carecía de seguro obligatorio y le constaba como caducada la Inspección Técnica de Vehículos (ITV), motivos todos ellos por los que fue denunciado. El turismo fue inmovilizado hasta la desaparición de las causas que motivaron la inmovilización. Así se ha dado a conocer en el momento en que el sector de Tráfico de la Guardia Civil de Galicia intensificó la vigilancia de los límites genéricos de las vías interurbanas, con especial atención en las autopistas y autovías sin olvidar las carreteras convencionales, en el marco de la campaña específica de control de velocidad desarrollada por la Dirección General de Tráfico (DGT), con el objetivo de evitar conductas de riesgo para la seguridad vial, protegiendo con ello la integridad de todos los usuarios de la vía.
Dicha campaña incide en uno de los principales factores de la siniestralidad vial, la velocidad. Durante el desarrollo de la misma, los radares móviles de los que dispone el sector de Tráfico en Galicia se ubicarán principalmente en vehículos rotulados con los colores oficiales, haciendo uso de ellos en menor medida en los vehículos con colores comerciales, tratando con ello de reducir la siniestralidad en las vías de comunicación de Galicia. Desde el instituto armado indican que los siniestros viales tipo en la comunidad autonómica son las salidas de vía, en las que normalmente se conjugan la distracción y la velocidad excesiva o inadecuada al estado de la vía.