El fuerte oleaje que azotó al litoral de Ribeira a partir de las tres de esta tarde, coincidiendo con la pleamar, provocó el derribo de buena parte del petril que separa el paseo marítimo de la playa de Area Secada, en la zona de O Touro. Los bloques pesados y alargados de piedra de granito que forman ese murete fueron desplazados varios metros. Ocurrió en torno las cuatro de esta tarde en uno de los momentos en que el temporal golpeó con mayor fuerza, aunque hubo otros momentos a los largo de la jornada en que la lluvia fue intensa y el viento sopló con mucha fuerza. El corte del paso se mantendrá hasta que se repongan a su sitios esos bloques de piedra de gran tamaño y estén garantizdas las condiciones de seguriddad. Fue la incidencia más destacada entre las más de 25 que se registraron hasta primeras horas de la noche.
Al lugar de ese suceso se desplazó la dotación de servicio del Grupo de Atención ás Emerxencias Municipal (GAEM), que instaló un cordón de seguridad para evitar que no puedan pasar los vehículos y que la gente tampoco transite por ese entorno por suponer un riesgo. Los efectivos del GAEM tuvieron una jornada muy ajetreada durante la jornada, en la que también cortaron el tráfico de vehículos con la colocación de cordones de seguridad en un par de pistas asfaltadas situadas en las inmediaciones de la iglesia parroquia de San Xiao de Artes y en la aldea de Sirves debido a la caída de postes del tendido eléctrico que bloquearon el paso, y que están pendientes de que la empresa responsable mande a sus operarios para retirarlos.
Además, también se produjeron caídas de árboles como en la zona de Balteiro, en la parroquia ribeirense de Oleiros y que cortaba una pista, procediendo los miembros del GAEM a su retirada, similar a lo que hicieron en Couso (Aguiño y Coroso, operación que también llevaron a cabo los los Bomberos de Ribeira con otro árbol en una pista de A Pobra. Estos últimos profesionales, pertenecientes al Consorcio Provincial Contraíncendios e Salvamento da Coruña, también acudieron a última hora de la mañana a retirar unas planchas sueltas del lateral de un edificio en la Avenida das Carolinas, en Ribeira, así como acudieron al aviso por la caída de tela asfáltica de un inmueble a la Rúa do Campo, también en el centro de la capital barbanzana, en la que procedieron a la colocación de cordones de seguridad para que no pasasen vehículos ni personas por el riesgo que suponía esa situación.
Además, fueron numerosos los contenedores de basura que fueron tirados o desplazados por el viento y en los que los servicios de emergencias o de la empresa concesionaria, así como algunos ciudadanos a título particular, procedieron a su recolocación, así como cables del tendido eléctrico caídos, que dejaron sin suministro eléctrico en diferentes lugares de Aguiño, Carreira, Castiñeiras y Palmeira, entre otros. Ese tipo de incidencias, junto con la formación de balsas de agua y carreteras convertidas en auténticos ríos, se repitieron por diferentes lugares de los cuatro municipios que conforman la comarca de O Barbanza.