Rianxo bajó por este año el telón de sus fiestas más aguardadas, A Guadalupe, y sus vecinos ya iniciaron la cuenta atrás hasta la próxima edición. Aunque para mucha gente la diversión acabó después de la primera luz del día, incluso tras dejar de sonar la música de las orquestas, para una gran mayoría lo hizo al rematar la tradicional ceremonia de las bengalas y la cantata de A Rianxeira, animados por los grupos Fama, Saudade y Charleston Big Band. En ese momento se contabilizaron unas 15.000 personas en el campo de la fiesta, situado en la Praza Castelao y su entorno. Pero, no todos estaban allí, como se deduce de lo indicado pro algún integrante del Ejecutivo local, que precisó que fueron unas 20.000 personas las que se dieron cita esa noche en la villa. 

Al acabar de cantar el himno oficioso de Galicia, tomó la palabra el recién estrenado presidente de la comisión de fiestas, Carlos Ces, quien manifestó que resulta fácil hacer estas fiestas mientras haya rianxeiros, que son los que con su ejemplo de participación hacen que todo vaya sobre ruedas. Y precisó que tendrán Guadalupe no sólo durante una semana sino todo el año "dándolle vida ao pobo".  En este sentido se refirió a que eso se consigue participando en las comisiones de fiestas de las parroquias, como la de Taragoña que regresarán para el 2023,, en las de Leiro, en las de O Araño, en la de A Vacariza, en las de O Pazo, en las  del Carmen,  o las de Asados. Pero, Carlos Ces también animó a los rianxeiros a participar en asociaicones culturales, deportivas, a pasear, a hacer vida nocturna, a bajar a los bares, a comprar y consumir en lso negocios de sus vecinos y, en definitiva, para dejar de escuchar que Rianxo está muerto, pues él está convencido de que está muy vivo y que A Guadalupe es una demostración, "así que non o matemos", subrayó. 

Como no podía faltar, se pidió a gritos que botase “Xixi”, su antecesor, que no estaba en el palco, pero a buen seguro que lo hizo en el lugar de la fiesta en el que se encontraba, estando atendo desde la sombra de que todo saliera bien, pero disfrutando aún más si cabe de su devoción por la Virxe Moreniña. Y fue a "Xixi", Ramón Iglesias, a quien le agracedieron su legado después de dedicarle media vida a estas celebraciones -a excepción de un par de periodos en lso que fueron presidentes Amancio y Lis-, algo que Carlso Ces destacó como uno de los factores que está haciendo que las Festas da Gudalupe hayan sido un nuevo éxito y fue por eso por lo que le tributaron un homenaje al cantanrle "que bote Xixí".