La corporación municipal boirense aprobó con el único voto favorable de los 9 concejales del PSOE y el contrario de los 8 ediles de la oposición (PP, BNG y BN) el dictamen por el que se desestima la solicitud presentada por la mercantil Estrella del Mar para la prórroga de la concesión de dominio público otorgada por el Ayuntamiento de Boiro el 11 de marzo de 1993 para la explotación de un servicio de bar-restaurante en Praia Xardín. El portavoz socialista, Luis Ruiz, indicó que los informes jurídicos encargados señalan que la prórroga en este caso no tiene “encaixe xurídico”, a lo que el portavoz del PP, Fernando García Diéguez, que propuso que el asunto quedase sobre la mesa, algo que no prosperó, le replicó que sí existe esa posibilidad, refiriéndose a que “vostedes, os socialistas, llelo buscaron á Ley de Amnistía, e imaxínese a esto que é un chiringuito de praia”, por lo que le pidió al Gobiero local que "lle dea unha volta".

Luis Ruiz recordó que el 11 de marzo de 1993 el pleno municipal boirense adjudicó la concesión para un bar-restaurante en Praia Xardín, precisando que el contrato, que se firmó el 10 de abril de ese mismo año, figura que tiene un límite de 30 año. "Por parte da mercantil que xestiona o inmoble, faltando un día para rematar os 30 anos da concesión, solicitou unha prórroga por 30 anos máis e deféndea cunha argumentación e unha serie de preceptos xurídicos coma respaldo". En base a eso, el edil socialista indicó que solicitaron a su departamento jurídico que les informase sobre las posibilidades que había de llevar a cabo esa prórroga. "Ese informe nos dí que non son de aplicación os artigos que presenta como amparo e que non se pode prorrogar por 30 anos máis esta concesión que está limitada por contrato. Esto o sabía a mercantil desde o primeiro momento. E entón, ao non ter encaixe xurídico, temos que desestimala". También dijo que se reunieron varias veces "con esta xente" y que le dijeron que buscasen el encaje jurídico o fórmula para prorrogar, pero agregó que no les facilitó nada. 

Dejarle hablar

Dores Torrado, edila de Boiro Novo, sostuvo durante su primer turno de palabra que entre el público presente en el salón noble del consistorio se encontraba la persona afectada, José Davíd Rodríguez Santamaría, que solicitó intervenir en un pleno en más de una ocasión, y que creía que, como representantes del pueblo de Boiro, debían dejarle hablar para escuchar lo que tiene que decir ese vecino y empresario al respecto, independientemente de que luego estén de acuerdo o no en el fondo del asunto, y sobre todo al tener que votar sobre ese asunto incluido en el orden del día para tener todos los argumentos para hacerlo en un sentido u otro. Incluso, llegó a ofrecer la posibilidad de utilizar su segundo turno a David Rodríguez. El alcalde, José Ramón Romero, le replicó que "esta persoa intervirá no turno de rogos e preguntas, pero no punto da orde do día o público non pode intervir".

Patricia Silva, concejala del BNG, sostuvo que tanto a ella como a su partido se le plantean muchas dudas sobre esta cuestión, recordando que cuando se llevó al anterior pleno finalmente se retiró del orden del día "por un defecto de forma". También indicó hay un proceso contencioso-administrativo abierto que inició la propiedad del negocio por una presunta deuda en el pago del canon por importe de 65.000 euros, debido a un malentendido, pero que no entiende cuál es la motivación de dicha denegación de la prórroga de la concesión es por una cuestión administrativa, económica o algo personal "ou algunha rencilla á que vostedes queren levar con algún rendemento á promesa política que fixeron no seu momento". Y anunció que si al rematar esta concesión pública van a sacarla a concurso, velarán que sea limpio y estarán pendientes de que sea así y a quién se le concede. En respuesta a esas manifestaciones, Luis Ruiz le afeó sus palabras relativas a "rencillas", indicando que no sabía a que e refería, pero insistió en que la decisión que apoyan "é tan sinxela como ler o informe xurídico que di que a prórroga non é posible".
 

Encaje jurídico

Tanto Silva Fajardo como García Diéguez plantearon que existe legislación que permite darle encaje jurídico a la aceptar la prórroga de la concesión. La primera dijo que, en atención a la Ley de Patrimonio de Administraciones Pública, se pueda acordar la adjudicación directa cuando por razones excepcionales se considere conveniente efectuar la venta en favor del ocupante del inmueble. Por su parte, el líder popular, que dijo que pese a que el 14 de abril del año pasado remató dicha concesión, ya presentó un proyecto par la reconstrucción de las instalaciones tras el devastador incendio que sufrió en noviembre de 2022, y precisó que la Administración tiene la facultad de cambiar la concesión teniendo en cuenta que el equilibrio financiero y la amortización de esa reconstrucción permitiría una prórroga. "Si ustedes no han mirado esa circunstancia no es culpa del empresario, pero a través de eso podría tener el encaje legal. Si se accediera a bla reconstrucción con el proyecto presentado, lógicamente pediría un equilibrio financiero" en función de la amortización que si recoge la ley. Y esa es una forma de profundizar y conseguir esa ampliación".
 

El portavoz municipal del PSOE de Boiro dijo que el proceso contencioso-administrativo presentado por la mercantil contra el Ayuntamiento es por la falta de pago del canon de varios años, algo que precisó también es motivo para la escisión del contrato. Además, a Patricia Silva le respondió que el contencioso-administrativo no está presentado por la prórroga, por lo que "será un xuíz o que determine se é de aplicación o artigo que dí vostede ou non, que é o que nos din os xuristas para este caso". De igual modo, Luis Ruiz manifestó que con el incendio del restaurante "quen perdeu foron os veciños de Boiro e non o empresario, que o disfrutou 29 anos e 8 meses, porque a concesión de 1993 dí que se pagará un canon anual polo inmoble e que ao cabo dos 30 anos o inmoble quedará en perfectas condicións en propiedade do Concello. Por iso o canon é menor, porque hai un equilibrio financeiro". 

Recordó que esas instalaciones ardieron cuatro meses antes de que pasase  ser del Ayuntamiento e indicó que la posible nueva licitación que podría hacerse con ese inmueble si estuviera en condiciones al rematar el contrato, el canon sería más alto, pues no habría que construir una nueva edificación. "O empresario podería pedir a exención do canon deses catro mesese o Concello llela daría porque non a puido utilizar nese tempo", precisó. "Agora, se o volvemos a licitar, no equilibrio financeiro da concesión hai que meter unha nova edificación e o canon volvería a ser máis baixo outra vez", concluyó su segunda intervención.