La mejora de las conducciones de saneamiento en las últimas semanas en Vilanova de Arousa, con el sellado de fugas, ha permitido que la calidad de las aguas mejore lo suficiente como para reabrir al marisqueo al menos una zona de trabajo en la ensenada de O Esteiro. Se trata del área que cerró en octubre por contaminación y que desencadenó el malestar y las movilizaciones de las mariscadoras.
Las muestras tomadas el lunes y analizadas esta semana en el Intecmar permiten reabrir esta zona más interna de O Esteiro. O Ariño, sin embargo, no ha corrido la misma suerte. El patrón mayor, Rosalino Díaz, explicaba ayer que la parte de O Esteiro que abre “estaba en zona C provisional”, con lo que el cambio se puede hacer de forma más ágil. No obstante, la parte más baja “leva un ano en zona C, desde o mes de decembro pasado, polo que hai que facer máis probas. Aínda así, as expectativas son boas”, confiando en que pueda reabrir en un futuro.
La llegada de las bombas permitirá completar la mejora del saneamiento para aumentar más la calidad del agua
Más si se tiene en cuenta que el alcalde, Gonzalo Durán, confirmó ayer al sector la reciente llegada de las nuevas bombas, lo que permitirá concluir las labores pendientes de mejora del saneamiento próximamente.
Con todo, la situación, aunque da un cierto “alivio” al marisqueo a pie, lleva a los rañeiros “á ruína”, valoraba ayer el patrón mayor. Al estar O Ariño cerrado, dan por perdida la campaña navideña, que se suma a uno de los peores años de trabajo de los que se recuerda.
Con las analíticas respaldando la apertura de O Esteiro, la agrupación de a pie se ha puesto ya manos a la obra para sacar adelante cuanto antes el papeleo necesario para volver a la actividad extractiva en la playa. La intención es poder hacerlo ya este viernes, si no hay sorpresas. Con ello, tratarían de salvar al menos una parte de esta campaña navideña.
En cuanto a la situación de la agrupación de a flote, está prevista la celebración de una reunión hoy para analizar la situación y tomar decisiones.