La parroquia de Corvillón se despertó ayer aún con mal cuerpo por el altercado vivido el lunes que resultó con dos policías locales heridos, pero el día transcurrió tranquilo, aunque con más vigilancia en la entrada y salida del colegio. No obstante, la preocupación sigue ahí y el Concello ya ha empezado a dar pasos para “erradicar por completo esta situación conflitiva”, declaró el concejal de Seguridade Cidadá.
José Ramón Abal Varela explicó que el Concello ha abierto un expediente de investigación sobre la vivienda denunciada como conflictiva por los vecinos de Corvillón y donde reside el hombre que el pasado lunes protagonizo el episodio y que ese mismo día, tras ser examinado en un hospital, pasó a disposición judicial y quedó en libertad con cargos, acusado de los delitos de atentado contra la autoridad y de resistencia.
El edil detalló que han recibido una denuncia particular señalando la existencia de una actividad económica en este inmueble que consistiría en el arrendamiento de habitaciones a terceras personas y que se estaría desarrollando “de maneira presuntamente ilícita”. Así las cosas, han abierto ese expediente administrativo para recabar toda la información sobre si cuenta con la preceptiva licencia de actividad y todos las autorizaciones que sean precisas en un caso así, tanto en la administración local como en la autonómica o estatal.
Garantiza el socio de Pode que no van a escatimar en esfuerzos y los técnicos ya están trabajando para recabar toda la información, además de la procedente de la Policía Local: “Tomaremos todas as vías legais posibles para erradicar por completo esta situación conflitiva”. Es más, según vaya transcurriendo la semana, no descarta pedir la convocatoria de una Xunta Local de Seguridade, que implica a la administración central y a las fuerzas y cuerpos de seguridad. Considera que el caso “ten a suficiente gravidade e temos que actuar antes de que pase unha desgraza. Os veciños están preocupados e nós tamén. Hai que recoñecer que temos un problema de seguridade e non me quero imaxinar se chega a entrar no colexio”.
Relató que hace un par de semanas detectaron a una persona con intención de robar en una casa con personas mayores y que la anterior detuvieron a otra persona, que escapó en el traslado a los juzgados y “fuxiu polo centro da vila”. Según le han informado, ambas guardan relación con esta vivienda, donde “se reúnen persoas conflitivas e hai consumo de estupefacientes”, añadió.
También destacó la gravedad de las lesiones sufridas por el agente que se cayó cuando intentaba evitar que el hombre detenido subiese por el portal del colegio en un claro estado de enajenación y alteración por el cual no respondía a los intentos por calmarlo y que le llevaron a intentar huir por donde fuera, según se ha desprendido de las primeras tomas de declaración
De hecho, el alcalde, Samuel Lago, quiso enviar un mensaje de “tranquilidade”, señalando que el “colexio é un entorno seguro” y que las “forzas e corpos de seguridade non consideran que sexa unha persoa agresiva, se non que sufriu unha crisis de axitación e nervios e intentaba fuxir de algo que non existía. Foi un caso aislado”.
Abal Varela discrepa con las sensaciones transmitidas por su socio socialista: “A situación é moi preocupante, non falamos de xente pacífica e tememos que pode empeorar. O diagnóstico feito polos veciños é acertado e ese é a mensaxe que temos que trasladar á cidadanía”, declaró.
En cuanto a los agentes heridos, siguen de baja y el más grave finalmente no fue operado ayer y estaba pendiente de la intervención. En la caída sufrió una rotura de ligamentos y del peroné de la pierna derecha.