Consuelo García de Vicuña cumplió hoy los 104 años con apenas achaques médicos y con muy buena memoria. ¿Su receta? Comer un ajo en ayunas todos los días y rezar. “Es muy devota del Corazón de Jesús y reza el rosario todos los días”, cuenta su hija María Jesús. El alcalde, Telmo Martín, y la concejala de Mayores, Paz Lago, se desplazaron ayer hasta su casa, en Avenida de León, para felicitarla.

La vecina —que es madre de cinco hijos— nació en Navarra donde se casó con su marido, pero pronto emigraron a Argentina y luego, a Venezuela. Allí permaneció hasta que la situación del país se complicó y uno de sus hijos necesitó asistencia médica, por lo que regresó a España, en Valencia. Desde hace seis años vive con una de sus hijas y su yerno.