El Concello de Cambados ha adjudicado por 30.000 euros la demolición por ejecución subsidiaria de la vivienda de la Avenida de Vilariño con orden de derribo desde hace 18 años. Formalizó el contrato a finales de agosto con un plazo de ejecución de diez días. El coste es de 4.000 euros menos del precio de licitación y este gasto deberá asumirlo la propiedad. Fuentes municipales explicaron en su día que la familia presentó un proyecto de legalización, pero fue desestimado y debían cumplir los requerimientos judiciales que le obligaban a tirar la casa de planta baja y alta, que se realizó sin licencia. También que ya había abonado el coste de redacción del proyecto de demolición.
La orden de derribo fue emitida en 2005 a raíz de la denuncia del vecino de enfrente y tras comprobar que se estaba levantando una edificación a partir de una estructura tipo galpón sin permiso y que era ilegalizable por no dar frente a la vía pública si no a una servidumbre de paso, entre otras cuestiones. Al no cumplirse, el denunciante siguió litigando para obligar al Ayuntamiento a seguir el procedimiento, es decir, la ejecución subsidiaria, denunciando a los sucesivos gobiernos locales por inactividad al no cumplir con los requerimientos judiciales.