Esta madrugada ha fallecido Andrés Rico, el espectador grovense que fue agredido durante un partido de balonmano base en Sanxenxo.
Este triste desenlace llega después de que el hombre llevase más de dos meses hospitalizado y no haya podido superar las graves lesiones sufridas.
El escenario de esta brutal agresión -el pasado 15 de diciembre- fue el pabellón de Vilalonga, lugar en el que se celebraba un encuentro de categoría cadete femenina entre el Sanxenxo Balonmano y el Balonmano Rasoeiro.
Según indicaron varios testigos que presenciaron los hechos, Rico, una persona muy conocida en el ámbito deportivo por llevar cada fin de semana a su niet a arbitrar los diferentes encuentros, fue víctima de una brutal agresión por arte de un espectador. Esto ocurrió, señalan, tras intentar de manera pacifica que este sujete cesara en su actitud violenta e insistentes faltas de respeto hacia el colegiado -su nieto-.
Proceso judicial
Tras este grave incidente, se inició un proceso judicial que todavá continúa. Tanto la familia de la víctima como la Federación Gallega de Balonmao -a través de un comunicado- esperan que el procedimiento concluya de manera contundente para el acusado.