Dos vecinas de A Illa de Arousa denuncian la presencia de un francotirador que, al parecer, se dedica a disparar a gatos con un arma de balines, hiriéndolos de gravedad.
La desagradable sorpresa la confirmaron esta semana dos veciñas de A Illa, cuando se encontraron herido a su gato Simón y cuando unas placas en el veterinario revelaron que tenía en su interior hasta cuatro de estos proyectiles.
Estas isleñas, residentes en el entorno de la Avenida da Ponte con la calle Cabodeiro, detallan que, desde hace un mes, disponen de una finca trasera en la que suelen dejar sueltos a sus dos gatos durante unas horas. El viernes, Simón regresó antes de lo esperado, apenas una hora después. Estaba hecho un ovillo sobre el felpudo y cuando lo cogieron en brazos, se mancharon la ropa de sangre. Presentaba tres orificios y creyeron que había sido mordido por un perro. Le hicieron unas curas y al día siguiente lo llevaron al veterinario. Allí unas placas revelaron que en dos de esos orificios había balines dentro: Uno junto a la columna y otro cerca de la cadera. La otra sorpresa se la llevaron al advertir otros dos proyectiles más, más antiguos, dentro de la caja torácica: Simón ya había sido tiroteado antes ese mes, pero no lo habían advertido. El gato fue operado de urgencia y se recupera ya en su hogar.
Las isleñas han contactado con la Policía Local y formalizarán denuncia el lunes.
Piden colaboración vecinal para aportar pistas que ayuden a la identificación del responsable, convencidas de que podría ser alguien de la zona desde una ventana. De hecho, temen que halla podido herir a más animales durante estas últimas semanas, porque afirman que en la zona hace un mes había bastantes gatos y ahora solo ven a los suyos.