La LXXII Festa do Albariño de Cambados vivió ayer su segunda jornada tras una inauguración multitudinaria y sin incidencias graves, en palabras del Concello. Además, a la degustación popular de A Calzada se sumó una de las actividades más jóvenes, pero con gran proyección dentro del evento: el Túnel del Vino del Salón Peña. El Consello Regulador de la DO Rías Baixas abrió este espacio de cata dirigido a profesionales y a los amantes del vino en general y que resulta “único” porque permite probar casi todo lo que está haciendo el sector con un total de 180 referencias procedentes de 70 bodegas y en un espacio bien organizado, con fichas descriptivas y el apoyo de un sumiller.

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Una treintena de personas asistieron a la primera sesión de la cita, cuyo coste es de 25 euros y que funcionará hasta el domingo. El sumiller Sebastián González explicó que el público “es muy variado. Hay desde amateurs hasta algunos que se rigen por las guías y vienen a probar algo concreto y luego profesionales”. De los primeros eran la pontevedresa Toya Suárez y José Macías, procedente de otra tierra de vinos –Valladolid– y que acudía equipado con una lista con una decena de Rías Baixas que quería degustar. Era su primera vez y conocieron el Túnel tras visitar una bodega. 

También eran novatos Xisela Mosquera y David Rivas, procedentes de la subzona del Ulla y conocedores del albariño también por tradición familiar. Su objetivo era “descubrir bodegas que no conocemos y aquí tienes mucha más facilidad”. Aunque reconocieron tener una marca que les “fascina” y, casualidades de la vida, tenían al lado a uno de los responsables de lograr ese vino, el enólogo Cayetano Otero, un destacado profesional de O Salnés que es un asiduo de este espacio de la Festa do Albariño.  

En esta edición, la decimotercera, la añada más antigua que se puede encontrar pertenece a 2012 y cada vez más bodegas envían este tipo de elaboraciones –también se puede catar la última, la de 2023–. De hecho, el número de mesas de vinificaciones especiales se ha duplicado en las útlimas ediciones (hay cuatro) y dentro de ellas se distinguen entre madera y nuevas tendencias (granito, ánfora, etc.). Además de todo esto, hay secciones dedicadas a tintos y espumosos y ejemplares de las cinco subzonas de la denominación de origen. 

González señaló que uno de los principales atractivos de esta actividad es precisamente esto, la posibilidad de encontrar “vinos más peculiares o complejos y de muchísima calidad todos juntos”. Por eso decía ayer el presidente del Consello Regulador, Isidoro Serantes, que es una “oportunidade única cada ano”. El viticultor y bodeguero también valoró la primera jornada en A Calzada, destacando la importante presencia de jóvenes porque “fai moita ilusión e axuda nas ganas de seguir traballando para que a xente moza entre neste mundo do viño”. 

Las autoridades brindaron por un nuevo éxito del Túnel con el albariño ganador en 2023, Puerta Santa, de Grupo Reboreda Morgadío.  Entre ellos estaban, entre otros, el alcalde, Samuel Lago, quien destacó que “goza de boa saúde”, y otros concejales de gobierno y oposición; el diputado Javier Tourís, y los directores generales de la Axencia Galega de Calidade Alimentaria (Agacal) y de Gandaría, Agricultura e Industrias Agroalimentarias, Martín Alemparte y Silvestre José Balseiros, respectivamente.

La Xunta trabaja con el Estado ante la “dificultade” del sector a la hora de “xustificar” algunos tipos ayudas 

El primero indicó que este espacio va en la línea de las actuaciones de Medio Rural en materia de “actividades de promoción dos produtos galegos de calidade diferenciada” y que Rías Baixas “é un buque insignia” en el sector vinícola gallego. 

Por su parte, Balseiros, entre otras cosas, avanzó que están en conversaciones con el Ministerio ante la “extraordinaria dificultade para executar algunhas axudas” que tiene el sector del vino de Galicia, como en las de “promoción en terceiros países, e hai boa sintonía, penso que podemos chegar a unha solución”.