La Dirección Xeral de Calidade Ambiental, Sostibilidade e Cambio Climático decidió no someter a evaluación ambiental estratégica la modificación puntual del Plan Especial del Puerto, por lo que ya se da por concluida esta tramitación. Este proyecto permitirá liberar el muelle de O Ramal, al trasladar la actividad que allí se realiza a las superficies ganadas en Comercial y Ferrazo.
Tras el periodo de consultas, el organismo autonómico resuelve que non se prevén efectos ambientales significativos, aunque señalan que deberán cumplirse con las medidas que recoge la propuesta transcrita para favorecer la integración.
Este informe perderá validez y cesará la producción de sus efectos si no se aprueba dicha modificación del Plan Especial del Puerto en un plazo de seis años. Con esta resolución, se da por concluida la tramitación ambiental y se da vía verde a la ejecución de dicho proyecto.
Los principales objetivos de esta modificación son los de adaptar el Plan Especial del Puerto al nuevo marco legal, así como recoger el convenio urbanístico pactado con el Concello en 1998, para abrir la ciudad al mar. Además, el documento pretende ordenar y distribuir los nuevos espacios, propiciar la navegación deportiva mediante la mejora de las dársenas y reordenar el muelle de Pasajeros.
El documento permite incorporar al ámbito del Plan Especial las nuevas superficies generadas en los muelles Comercial y Ferrazo, de 23.173,53 y 66.802,08 metros cuadrados, respectivamente.
Las nuevas superficies incorporadas están constituidas por una explanada y prolongación de una línea de atraque en el muelle de Ferrazo, así como otra explanada con la que se amplió el muelle Comercial. Estas áreas se encuentran actualmente libres de edificación, pavimentadas y parcialmente ocupadas por varias grúas de carga y descarga, varios de tránsito interno y acumulaciones de contenedores y otros materiales.
La propuesta que presentó la Autoridad Portuaria de Vilagarcía, y que cuenta ya con el visto bueno de la Dirección Xeral de Calidade Ambiental, contempla una serie de medidas para reducir el impacto paisajístico, aunque el propio organismo, así como el Instituto de Estudos do Territorio, señalan que no se modifican las características del paisaje portuario existente.
Algunas de las medidas que se contemplan son la reposición de la vegetación afectada y la restauración de las coberturas del suelo; la integración, conservación o traslado (de ser el caso) de elementos como árboles; la ocultación o apantallamiento visual de construcciones o instalaciones o la reducción de contaminación acústica, luminosa u olfativa, así como la naturalización de canales abiertos para la desviación del agua. Esta modificación del Plan Especial del Puerto tiene una consecuencia que será más vistosa para la ciudadanía vilagarciana: La liberación del muelle de O Ramal, donde ya no habrá naves de almacenamiento. Ahora, queda pendiente de explicar la propuesta completa de intervención que rada y Concello tienen previstos para estos terrenos. La administración municipal adquirió una parcela que sirve de antesala a la playa de A Concha y donde anunciaron una zona de esparcimiento.