Entrar en el Libro Guinness de los Récords es el reto que el barrio de O Piñeiriño –y en general todo Vilagarcía– se pone de cara al próximo año. El alcalde de la ciudad, Alberto Varela, visitó esta mini creación navideña en el Centro Cultural Breogán y manifestó su intención de luchar para que la nomenclatura del árbol más pequeño del mundo se oficialice y se fije en uno de los libros más populares. El regidor estuvo acompañado en su visita por miembros de la directiva de la asociación de vecinos y por el científico creador de tan curiosa figura, Adrián Seijas Gamardo. Fue él el que explicó que el árbol se creó con una máquina que –en el laboratorio en el que trabaja e investiga– sirve para la regeneración de órganos humanos. El científico explicó que en total se hicieron doce pruebas del árbol que ahora puede verse en O Piñeiriño y que el tiempo empleado fue de unos minutos.

Desde la asociación de vecinos Pedro Falcón explicó que en una época en la que “hai unha competición para ver quen ten a árbore máis grande, aquí o que tentamos facer é reivindicar a máis pequena”. Además expresó que el hecho de que sean unos científicos de un laboratorio holandés los encargados de elaborar el mini árbol es “un modo de criticar o feito de que os nosos talentos se teñan que ir para fóra”.

El árbol del Centro Cultural de O Piñeiriño puede verse hasta finalizar las fiestas navideñas. Supera al de dos centímetros que colocó a este barrio vilagarciano en el foco mediático hace justo un año. Ahora para apreciarlo hay que verlo a través de un microscopio, dado que mide solo diez micrómetros.