El Atlético Villalonga comienza esta semana la segunda vuelta liguera. Las de Edu González se colocan como octavas clasificadas del grupo uno de Segunda RFEF con 21 puntos. Ahora, este sábado a las 16 horas tendrán que enfrentarse al hueso de la categoría, el Athletic de Bilbao B, un equipo recién descendido de Primera RFEF y que ya puso las cosas muy complicadas a las de González en su visita a San Pedro.
Desde el club confían plenamente en el equipo, esperando llegar cuanto antes a los puntos que aseguren su permanencia en la categoría. “Veo al equipo muy bien. Empezaron a entrenar ya el día tres y ayer descansaron por reyes, pero las jugadoras están muy bien”, comenta Kike, presidente del Atlético Villalonga.
En los últimos cinco partidos del año, las jugadoras lograron un balance de dos derrotas, dos victorias y un empate, antes de su visita a Lezama. “Sabemos que es un rival duro, al final, es un recién descendido. El equipo está para competir y eso es lo que trataremos de hacer en nuestra visita, y si nos podemos traer los tres puntos, mejor”, recalca el presidente. El objetivo del Atlético Villalonga pasa por salvar la categoría, para lo que necesitan llegar a sumar entre 33 y 35 puntos.
Las de González están a 14 puntos de asegurarse del todo la continuidad en Segunda RFEF para la próxima temporada. “Mi experiencia me dice que las segundas vueltas suelen ser más complicadas porque los equipos ya saben cómo juegas. Tendremos que meter todas las ocasiones de gol que tengamos y que nos respeten las lesiones sobre todo”, destaca Kike.
Así, el Atlético Villalonga continuará trabajando como lo hizo hasta ahora, mientras que los directivos continúan ojeando el mercado de fichajes, ante la posibilidad de la llegada de alguna nueva jugadora. “Si viene alguien tendrá que ser una jugadora que venga a marcar la diferencia. Estamos viendo las opciones que nos proponen, pero de momento no hay nada que nos valga la pena, pero tenemos hasta el dos de febrero”, confirma