El FC Porto se proclamó campeón de la cuarta edición de la Copa Ribadumia en categoría benjamín al vencer en la gran final al RC Celta en la tanda de penaltis. El partido acabó con empate 2-2 y título se decidió en una emocionante ronda de penas máximas, en la que los portugueses se impusieron por 4-3 con su portero Rodrigo Gomes, elegido como el mejor el torneo, como héroe de la victoria.
El Porto toma el relevo del Betis y se corona en una edición en la que los favoritos no decepcionaron. De hecho seite de los ocho cabezas de serie se metieron en cuartos. No hubo pleno porque Celta y Braga se cruzaron en octavos, con victoria gallega a penaltis. Las Palmas y Valencia, que realizaron un gran campeonato, llegaron hasta unas semifinales que fueron emocionantes, en consonancia con la tónica predominante en los tres días del evento.
En la final empezó mejor el Celta, pero el Porto se activó en ataque y generó hasta cuatro ocasiones claras, a las que respondió bien el portero del RC Celta Mateo Piñeiro.
La insistencia portista obtuvo su premio en la segunda parte con el gol de Antonio Gomes, que enganchó una gran volea desde fuera del área que se coló en la portería del Celta tras golpear en un poste. Aunque el equipo gallego intentó reaccionar, a su rival se le vio con más energía en la final. De todas formas el Celta consiguió empatar en una acción de saque de banda que finalizó con un gran remate el delantero Lucas, pero acto seguido llegó el 2-1. En el saque de centro Salvador Machado lanzó directamente a puerta desde el centro del campo. Le salió un misil que se coló cerca del larguero de la portería gallega, cortando y silenciando la celebración celtista. En una falta muy protestada por los portugueses, el defensa arousano del RC Celta Javier Radío se sacó un derechazo desde la zona izquierda y marcó un golazo para llevar la final a los penaltis.
Ambos habían eliminado de esta forma a Braga y Deportivo en las rondas de octavos y cuartos. Por lo que afrontaron con confianza la tanda. Fueron necesarios ocho lanzamientos hasta que llegó el error, merced al acierto del meta portugués que dio paso a la celebración del Porto en otra jornada con buen ambiente en A Senra, pese a que muchos de los 52 equipos participantes ya estaban de regreso a casa.
El Vallovín oventense, también desde los penaltis tras el 2-2 en el partido, se llevó la fase de consolación (Copa Clae Viajes) ante la escuela madrileña David Villa 7.
El premio a mejor jugador se lo llevó Julen Sarasola, del Athletic Club Eskola. Shinta Nishyama (Damm) fue el máximo goleador. Fue designado como mejor portero Rodrigo Queirós (Porto). Juan Antonio López, del Valencia, se llevó el galardón al mejor entrenador. La de la Las Palmas fue elegida como la mejor afición y el Athletic Club Eskola se llevó el premio al equipo más solidario.
En cuanto al ocho ideal, los jugadores seleccionados por la organización fueron: Rodrigo Queirós (Porto), Javier Radío (Celta), Alejandro Robaina (Las Palmas), Salvador Machado (Porto), Martín Parga (Celta), Julen Sarasola (Athletic Eskola), Shinta Nishyama (Damm) y Jorge Latorre (Valencia).