Jéssica Bouzas se despide, de momento, de Asia. La tenista arousana cayó en la primera ronda del WTA 1000 de Pekín ante la americana Peyton Stearns por un 2-6 y 4-6. Un duelo en el que Bouzas peleó como nunca, pero en el que sufrió muchísimo con el saque de Stearns.
Lo cierto, es que enfrente, la tenista vilagarciana tenía a la número 46 del mundo, once puestos por encima de Jéssica Bouzas en el ránking WTA (57). Asimismo, Bouzas llevaba bastante tiempo sin coger una raqueta, ya que su última competición fue la tercera ronda del US Open, en la que cayó ante Jéssica Pegula.
Si algo dinamitó el encuentro ante Peyton Stearns eso fue el saque. Además, Bouzas volvió a caer en el error de regalar más de siete faltas dobles a la tenista americana. Asimismo, la americana ganaba en el 96% de los primeros servicios, dejando a Bouzas casi sin opciones ya en el primer set.
La americana activó el modo apisonadora ya en el primer set, mucho más fuerte que Bouzas, que seguía sin acertar en el dominio del saque. La arousana tuvo muchas dificultades con su servicio, a pesar de que logró romper el saque de su rival en cinco ocasiones, pero sus porcentajes al servicio fueron insuficientes y ganó solo el 41,5 % de los puntos con su primer saque. Por el contrario, en el segundo, la española luchó desde el principio para mantenerse con esperanzas en el marcador hasta el 4-4, antes de ceder los dos últimos juegos. Ahora, Stearns avanza a la segunda ronda, donde se medirá a la canadiense Leylah Fernandez.
Tras despedirse del WTA 1000 de Pekín, Jéssica Bouzas disfrutará de unas semanas de descanso, pero en octubre retomará la gira asiática, que la llevará primero a Japón a disputar el WTA 250 de Osaka. A la semana siguiente viajará a China para jugar el WTA 250 de Guangzhou, y cerrará la gira de tres semanas por Asia disputando a partir del 28 de octubre el WTA 250 de Hong Kong. En noviembre representará a España en Málaga en la Billie Jean King Cup (del 13 al 20 de noviembre).