El baloncesto vilagarciano de alto nivel está muy bien representado por un joven que parece no tener techo. Martín Fernández Carballo, que dio el salto a Primera FEB esta temporada al enrolarse en las filas del Club Baloncesto Ourense a las órdenes de Moncho López, está aprovechando sus minutos en la segunda categoría profesional del baloncesto español, considerada como la más fuerte de la última década.

Y es que coinciden Palencia y Obradoiro, llegados desde ACB, con equipos potentes que aspiran también al ascenso como Betis, Fuenlabrada, Burgos, Estudiantes o Tizona. El objetivo del equipo ourensano es la permanencia, pero después de las seis primeras jornadas es segundo con cinco victorias y una sola derrota. Un balance positivo en el que Martín Fernández, con sólo 22 años, tiene mucho que ver en su rol de jugador de rotación. 

En poco más de doce minutos en pista, el vilagarciano promedia 7,5 puntos y casi 9 de valoración. Y está siendo capaz de cambiar el rumbo de los partidos, asumiendo el papel de revulsivo con una fuerza mental al alcance de muy pocos, ya que lo hace saltando al campo por primera vez en las segundas partes. 

Contra Menorca entró a falta de dos minutos para el final del tercer cuarto y en diez minutos anotó 6 puntos y su equipo hizo un +12 con él en pista. Ante Inveready Gipuzkoa, en la única derrota en liga del COB hasta la fecha, entró en el minuto 24 con su equipo perdiendo por 19 puntos. Su aportación, en la que destacaron sus 9 puntos, hizo que el COB soñase con la remontada, llegando a estar sólo 3 abajo. En el último partido ante Morón, Martín Fernández ya entró en la rotación antes y acabó con 11 puntos, sin fallo en el tiro, y con 14 de valoración. 

El escolta, que incluso ha tenido que jugar de base en alguna ocasión debido a las bajas, ya se ha ganado el cariño de la afición, que disfruta con su talento y descaro, siempre asumiendo riesgos para penetrar y lanzar esas bombas que en su día popularizó Juan Carlos Navarro. 

Después de las tres últimas temporadas en las que destacó en Leb Plata (Segunda FEB) en Villarrobledo, Ponferrada y Albacete, el vilagarciano sigue progresando y aprendiendo, ahora en una categoría mucho más exigente. Ha mejorado en el aspecto físico y sobre todo en defensa, por lo que se está convirtiendo en un exterior cada vez más completo, del que se espera que empiece a asumir más tiros de tres puntos. Martin no tiene techo y en el COB están entusiasmados, sabedores que todavía va a progresar mucho más. El arousano disfruta en un equipo joven que juega un muy buen baloncesto, de forma colectiva y muy atractiva para el espectador. Con el sello de Moncho López, un entrenador de prestigio que está influyendo en el juego y crecimiento de Martín Fernández Carballo.