El arzobispo monseñor Francisco Prieto, acompañado del vicario general, José Andrés Fernández Farto, presidió el Consejo de Asuntos Económicos de la Diócesis el pasado 20 de diciembre. Este organismo diocesano, compuesto por sacerdotes y laicos cualificados en economía y derecho, tiene la responsabilidad, entre otras, de elaborar y aprobar anualmente el presupuesto de ingresos y gastos de la diócesis.
En un ejercicio de transparencia, la Iglesia Diocesana de Santiago de Compostela hizo público el presupuesto para el nuevo año. El ecónomo diocesano, Fernando Barros, considera que el escenario es bastante positivo: “Un presupuesto, el de 2025, que asciende a más de 25 millones de euros, y con el que se proyecta la consolidación de la Diócesis a la situación de prepandemia”.
Entre los puntos más destacados del presupuesto se prevé un incremento del 31,11% en las aportaciones de los fieles respecto al presupuesto de 2024, representando casi el 40% de los recursos. Asimismo, se observa un aumento del 6,47% en las aportaciones del Fondo Común Interdiocesano, lo que supone casi un 30% de los recursos.
En cuanto a los ingresos de patrimonio, se proyecta una reducción mínima del -1,49% debido al ajuste en ingresos financieros. También se contempla un aumento significativo de más del 60% en las subvenciones.
Se espera un incremento del 74,97% en la ayuda a la Iglesia Universal y un 52,29% en Actividades Pastorales. Por otra parte, se estima un incremento del 188,45% en gastos extraordinarios relacionados con programas de rehabilitación y conservación de edificios.
El presupuesto para 2025 muestra una capacidad de financiación de la Diócesis en 23.250 euros.
Entre los temas tratados durante la reunión, destacaron también los informes y propuestas de las Comisiones del Consejo de Asuntos Económicos: presupuestos y rendición de cuentas, Inversiones, y Acción social/inserción laboral. También se aprobó el presupuesto del Instituto para la Sustentación de los Clérigos 2025.
Se aprobaron los objetivos para 2025, que pasa por la transparencia, el sostenimiento y la corresponsabilidad. También se avanzará en la organización interna de la Curia, se continuará con la planificación de la planta de la Diócesis, así como desarrollar sistemas de control interno, potenciar la implementación del ERP en las Parroquias y otros entes diocesanos, y tratar de poner en marcha el proyecto de inventario de bienes muebles en la Diócesis.
El Consejo de Asuntos Económicos juega un papel fundamental en la administración de los recursos de la Diócesis de Santiago de Compostela. El presupuesto para 2025 refleja el compromiso de la Diócesis con el sostenimiento de sus actividades pastorales y asistenciales, así como con la inversión en el futuro de la Iglesia.