El tiempo de espera para conseguir una cita o consulta de médicos de familia en el centro de salud de Ribeira alcanza los 12 días. Profesionales que trabajan en dicho ambulatorio indicaron que esa es una de las consecuencias de la saturación que sufre en los últimos años el servicio, no sólo ya por la presión asistencial, que se espera que aumente a mediados de mes con el pico de la gripe, sino por el hecho de que ahora no cuenta con 7 de sus 14 facultativos, lo que provoca que los que están trabajando tengan que asumir pacientes de los profesionales ausentes, y de que algunos tienen que ir a Palmeira y Corrubedo a atender las plazas descubiertas.
Sobre esto último, el Partido Barbanza Independiente (PBBI) solicita dos médicos a tiempo completo para esos consultorios y que “no se tapen agujeros sacando médicos del ambulatorio de Ribeira”. Su portavoz dijo que la “precaria y vulnerable situación” de la Sanidad provoca que multitud de ribeirenses salgan a la calle a movilizarse por falta de médicos en los centros de salud. Vicente Mariño recordó que los primeros en hacerlo fueron los palmeirenses que, tras meses manifestándose, lograron un médico a tiempo completo “a costa de sacarlo del centro de salud de Ribeira”. Esto último, que se repite en Corrubedo, no convence al principal partido de la oposición, ya que “no se puede desvestir a un santo para vestir a otro”.
Mariño de Bricio considera que “habría que cubrir las dos plazas médicas de los centros de salud de Corrubedo y Palmeira, sin lapidar el centro de salud ribeirense”. Señala que el desplazamiento de facultativos origina un aumento de la lista de espera y una sobrecarga para los profesionales en un ambulatorio de Ribeira “ya mermado”. Y calificó de inaceptable que un cupo médico se mantenga dos años sin cubrir, siendo atendidos los pacientes cada vez por un profesional distinto. “La Sanidad Pública de calidad es un derecho fundamental, que al Ejecutivo local parece importarle poco, pues permite que se prolonguen en el tiempo esas situaciones”, dijo.
El BNG, que también pide que se cubra la única plaza de médico que tiene Corrubedo, denuncia la falta de facultativos y recursos en los centros de salud de Ribeira, que “non son froito da casualidade, senón que se derivan dunha década de recortes aplicados na Sanidade Pública, provocando un colapso sen precedentes”. “Pedímoslle ao PP que deixe de xogar coa saúde da xente, retire a pretensión de pechar os centros de saúde do rural e se poña a traballar para garantir a atención sanitaria de calidade”, concluyó la edila frentista Cruz Rivadulla.