Un conductor de 53 años, cuya identidad responde a las iniciales R.J.V., resultó herido de gravedad, pues presentaba un considerable golpe en la cabeza, por la que también sangraba, como consecuencia de un accidente de tráfico registrado en torno a las siete de esta mañana, a la altura del kilómetro 20,500 en la calzada en dirección hacia Ribeira de la Autovía do Barbanza, tras rebasar la curva a la izquierda que hay después del viaducto entre Taragoña y Ponte Beluso. Fue a las 7.03 horas cuando un particular contactó con el Centro Integrado de Atención ás Emerxencias (CIAE) 112 Galicia para avisar de que se había registrado un accidente con un coche que había volcado y que su único ocupante se encontraba atrapado en el interior del mismo.

 Con la información facilitada, los gestores del servicio de coordinación de las incidencias en la comunidad autónoma gallega dieron traslado del suceso a las dotaciones de guardia de los parques de Bomberos de Boiro y de Ribeira, así como a Urxencias Sanitarias de Galicia-061, a la empresa de mantenimiento de la AG-11, al servicio municipal de Protección Civil boirense y a la Guardia Civil de Tráfico de Santiago de Compostela. Los profesionales pertenecientes al Consorcio Provincial Contraincendios e Salvamento da Coruña tuvieron que excarcelar el BMW 318 siniestrado para poder acceder al conductor herido.

Los Bomberos boirenses y ribeirenses inmovilizaron con collarín y con tablero espinal a la víctima para poder sacarlo del coche y subirlo a la camilla de la ambulancia de Soporte Vital Básico (SVB) del 061 con base en Padrón, para seguidamente y junto con el personal técnico de emergencias sanitarias introducirlo en el vehículo asistencial para proceder a su traslado al servicio de Urxencias del Hospital do Barbanza para que recibiera la atención médica que precisaba y fuera sometido a pruebas para determinar el alcance de sus lesiones. El 061 también movilizó tras recibir el aviso a la ambulancia con base en O Saltiño con el equipo médico del PAC, pero su intervención no fue necesaria al haber llegado antes el otro vehículo asistencial anteriormente citado.
 

El personal de la empresa de mantenimiento de la Autovía do Barbanza, además de proceder finalmente a la limpieza de la vía, se encargó de señalizar adecuadamente para dirigir el tráfico rodado por el único carril que estaba libre, una situación que se mantuvo hasta aproximadamente las nueve menos cuarto de esta mañana, en que se pudo restablecer la normalidad en la circulación en dicha calzada. Al lugar también se movilizaron una patrulla de la Guardia Civil de Tráfico y una unidad de atestados del destacamento de Santiago de Compostela, que se encarga de instruir las diligencias sobre el accidente de circulación.