La Guardia Civil de Boiro se incautó de 660 dosis de cocaína y 105 de heroína, así como 6.530 euros en efectivo, en el marco de la operación antidroga "Serendepia" de la que dio cuenta ayer este periódico y que supuso la detención en la jornada del pasado viernes de dos hombres y una mujer en pleno casco urbano de A Pobra. El instituto armado acaba de confirmar que esas tres personas están siendo investigadas por su presunta implicación en un delito contra la salud pública en la modalidad de tráfico de drogas y de pertenencia a un grupo criminal. Los agentes de la Benemérita habían iniciado en abril del año pasado una investigación sobre los ahora arrestados durante una operación paralela e identificaron a un joven que supuestamente suministraba sustancias estupefacientes a un punto de venta de drogas en la zona de O Barbanza. 

La Guardia Civil detalla que la presión policial ejercida provocó que ese muchacho cambiase de domicilio constantemente para eludir el control de sus actividades ilícitas. Posteriormente, descubrieron que estaba vinculado a un familiar que también participaba en la distribución de drogas, con especial incidencia entre toxicómanos de la comarca, y también que los investigados trasladaron sus actividades a dos viviendas distintas en pleno casco urbano pobrense, entre la iglesia parroquial de Santa María A Antiga do Caramiñal y la urbanización Lamas e Andrés, y que estarían conectadas entre sí por un patio de luces. Desde la Guardia Civil indicaron que una de esas dos viviendas era utilizada para el suministro diario de drogas y la otra para almacenar dinero y sustancias estupefacientes. 
 

Según revelaron fuentes del instituto armado, el incremento del tráfico de toxicómanos en los últimos meses hizo evidente la existencia de la referida actividad delictiva, lo cual estaba generando múltiples quejas de ciudadanos ante la Policía por el continuo movimiento de individuos en las calles próximas y el temor a la comisión de delitos. El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Número 1 de Ribeira autorizó la entrada y registro en las dos viviendas investigadas, en las que, además de la citada droga y el dinero decomisados, se intervinieron una balanza digital de precisión, un vehículo, tres teléfonos móviles tipo smartphones, anotaciones y diverso material para la confección y manipulación de las dosis. 

En los operativos desarrollados por el equipo de investigación y agentes del cuartel boirense se contó con el apoyo de la Guardia Civil y de la Policía Local de A Pobra. Las diligencias, junto con los detenidos, fueron puestas a disposición de las autoridades judiciales, que ordenaron que los tres detenidos, a expensas de que sean citados durante la fase de instrucción, fueran puestos en libertad en las propias dependencias de la Benemérita tras tomarles declaración, en la que se acogieron a su derecho a no responder a las preguntas que se les pudiesen formular. Con esta operación, la Guardia Civil da por desarticulado ese grupo criminal y desactivados los puntos de suministro de sustancias estupefacientes, "continuando la labor policial enfocada en garantizar la seguridad de los ciudadanos en O Barbanza", precisaron desde el instituto armado.