De multitudinaria se podría calificar la Festa da Auga vivida en la tarde de ayer en A Pobra dentro de las actividades incluidas en el programa de los San Juerguines, que forman parte de las celebraciones del Carme do Pincheiros. De hecho, tanto los organizadores como la Policía Local indicaron que se habían superado las previsiones más optimistas y una marea humana de más de 3.000 personas se sumaron a este evento, que contó con siete puntos repartidos por la villa, atendidos por un total de 22 voluntarios de las agrupaciones de Protección Civil de A Pobra, Santiago, Rianxo, Porto do Son y Catoira, desde los que se surtió de agua con mangueras a los asistentes, que también se mojaron entre ellos con pistolas de juguete e, incluso, sulfatadoras, sin que se libras en de la mojadura los citados miembros de Protección Civil. A nadie le faltó una gota de agua, con lo que la localidad demostró estar alejada de la sequía que afecta a otras zonas.
Los San Juerguines también incluyeron pasabares, Olimpiada Pincheira en el club de remo y fiesta nocturna de la mano de Planet Disco Móvil. Además, durante la jornada de ayer con pasacalles de las bandas de música de Ribadumia y Caamaño, la banda de gaitas Ximiela y los grupos de gaitas Xiada, Arume, Os Pequenos do Barbanza, Andavía y Os Caraveiros, que ofrecieron conciertos con posterioridad, y también por la tarde la charanga Os Santiaguiño. También salieron en desfile, como lo volverán a hacer hoy y mañana los gigantes y cabezudos acompañados del grupo de gaitas Trécola. La verbena estuvo amenizada por las orquestas Foliada D’Ases y Venezia. Con anterioridad, a primera hora de la noche del viernes, Cristina Fernández, jefa de Medicina Preventiva del área sanitaria, ejerció de pregonera e indicó que el reconocimiento que se les hacía con esa elección contribuye a visibilizar la Sanidad Pública y sus profesionales, especialmente en este año en que se conmemora el 50 aniversario del servicio que dirige en el CHUS. También quiso recordar la crudeza con la que tocó “surfear as ondas” del coronavirus en la que, tirando de retranca, dijo que fue un momento de “tocar moito as narices”. Y pidió que ahora la gente disfrute “con sentidiño”.