El Juzgado de Instrucción y Primera Instancia número 1 de Vilagarcía ha señalado para el próximo jueves, día 5, un acto de conciliación que ha interpuesto la socialista María José Vales contra el patrón mayor, Rosalino Díaz. La concejala, a su vez expatrona mayor, defiende que se habrían vulnerado derechos de protección de datos en el seno del Pósito, en el marco de las graves acusaciones que el regidor, Gonzalo Durán, había vertido contra ella durante la pasada campaña electoral de las municipales, acusándola de “corrupción” en la Cofradía.
Durán basó su acusación en una diligencia de investigación de Fiscalía, que terminó reconocimiento un error material al incluir, indebidamente, el nombre de Vales. Ocurre que aquella investigación fiscal partía, a su vez, de una denuncia del patrón mayor. Y la defensa de Vales, además de mantener la querella contra el alcalde, abre ahora este procedimiento contra el patrón mayor, al considerar que, “como responsable del tratamiento de datos y representante legal de la Cofradía”, “ha incumplido el deber de custodia de la información de carácter personal generada en el desarrollo de la actividad de la Cofradía”, que acabó filtrada y, a la postre, habría servido para sostener la acusación del popular.
Vales buscará en la conciliación el siguiente acuerdo: Que el patrón mayor admita los hechos como ciertos, que reconozca que incumplió el deber de custodia de los datos y que la indemnice en la cantidad de 30.000 euros por los “daños morales”.
Eso sí, no consta que el patrón mayor hubiera participado en aquellas públicas acusaciones de supuesta corrupción, ni que realizase manifestaciones de corte político en el marco de aquella campaña electoral. Preguntado por este periódico, ayer también prefirió mantenerse al margen y no realizar declaraciones.