La Xunta ha recibido siete ofertas para renovar el firme en cinco carreteras autonómicas a su paso por once municipios del área de Pontevedra y de la comarca de O Salnés, con una inversión de 3,3 millones de euros.

Según el gobierno gallego, los trabajos cuentan con un plazo de ejecución de nueve meses y tienen como objetivo mejorar la capa de rodadura en varios tramos de las carreteras PO-226, PO-303, PO-307, PO-308 y PO-550, que atraviesan los municipios de Cuntis, Moraña, Barro, Poio, Sanxenxo, Meaño, Vilanova de Arousa, A Illa de Arousa –el Concello llevaba años demandándolo–, O Grove, Cambados y Ribadumia.

Las actuaciones consistirán en la rehabilitación superficial del firme de las carreteras, restaurando o mejorando las características del pavimento, adecuando sus necesidades funcionales y de durabilidad.
Los trabajos incluirán la reparación de zonas de firme dañado mediante fresados localizados y reposición de una capa de firme, sellado de fisuras lineales con mezcla bituminosa y la creación de una nueva rodadura mediante recrecimiento de firme.

El proyecto de la Axencia Galega de Infraestruturas (AXI) señala que hay viales con el firme muy deteriorado, contando con una gran superficie de “piel de cocodrilo” y “malla gruesa” y que requieren de una actuación profunda, y otros con tramos puntuales en mal estado.