Catoira tendrá en este 2025 el macrocomplejo de ocio más novedoso de toda Galicia. Será en el Harpazul, el local de restauración puesto en marcha en julio de 2020 por el polifacético artista Roi Casal y que ahora se lanza a una propuesta novedosa y mucho más ambiciosa en su localidad natal. La inversión para esta iniciativa asciende – tal y como señalaron desde la dirección de la empresa Harpazul Experience – a seis millones de euros y la idea es que el complejo se inaugure el 5 de diciembre de este 2025. Es decir, la cuenta atrás está ya activada. De hecho las obras –justo en la parcela anexa al actual establecimiento hotelero– ya están en marcha y en los próximos días afectarán al actual edificio que mudará su apariencia por completo con la reforma de toda su fachada. De hecho se cerrará al público hasta el 13 de febrero precisamente por esta circunstancia.
Una vez culminados los trabajos previstos el complejo de ocio contará con una categoría de 4 estrellas superior. Así pues será uno de los 12 establecimientos de Galicia con distinciones de tal nivel (entre 5 estrellas y las citadas 4 superior). El complejo contará como una de las novedades más destacadas con la primera playa interior de Galicia, que permitirá su disfrute los 365 días del año. Desde la dirección de Harpazul Experience apuntan que es una zona de baño de más de 1.000 metros cuadrados de superficie, climatizada y con cubiertas retráctiles que estarán cerradas durante el invierno y se abrirán en la temporada estival cuando el tiempo acompañe. Serán dos piscinas grandes, elaboradas con materiales especiales y con zonas específicas de tratamiento. Un modelo que no es nada común en España, pero que sí existe en lugares de climas más bien fríos como los países nórdicos.
No es el único atractivo que contempla este macro proyecto, sino que además de la playa interior el Harpazul ofrecerá la posibilidad de comer en un restaurante temático o de tomarse algo en una cafetería-cocketelería climatizada en el jardín en torno a un lago artificial. Además se aprovechará el éxito que tiene la actual pantalla gigante que hay en la terraza exterior del Harpazul. Eso sí, llevándola a otro nivel. Estará en una sala central con capacidad para 250 personas.
Desde la dirección señalan que tanto el nuevo edificio como el que se está construyendo en una parcela anexa (y que fue adquirida) estarán interconectados entre sí y a la vez con el resto de las propuestas que ofrece el complejo con vistas al río Ulla. Eso sí, para disfrutar de cada una de las estancias no es necesario estar hospedado en las instalaciones. “Será un modelo moi similar aos clubs que hai en Norteamérica, pero sen necesidade de ser socio. Poderá acceder todo aquel que queira cun pago asequible, como ocorre agora coa piscina actual”, explican desde la empresa.
A mayores se construirá un aparcamiento subterráneo para facilitar el acceso en vehículo a aquellos que quieran usar las instalaciones u hospedarse en el hotel. El complejo ofrecerá seis apartamentos (de dos o tres dormitorios) y 29 habitaciones de diferentes categorías que puedan ir desde la estándar a “deluxe” con equipamientos de lo más actuales.
La dirección señala que la arquitectura del complejo harmonizará perfectamente con el entorno. “Somos conscientes da zona na que estamos”, explican. Los dos edificios (uno el que existe y otro ya en construcción) estarán conectados mediante una pasarela aérea. Indican además que dado el elevado consumo de agua que conllevan este tipo de instalaciones estas serán autosuficientes tanto en esto como en el suministro eléctrico. Las diferentes áreas se irán abriendo al público de forma progresiva y a medida que estén listas, pero el complejo al completo estará listo a principios del mes de diciembre.
La empresa indica que desde que abrió Harpazul han detectado que la clientela no solo busca dormir en la zona, sino una experiencia más completa. La mayoría de las personas que se alojan en este establecimiento no son de cerca y una vez que el complejo esté en marcha en su totalidad contarán con muchas alternativas de disfrute. Además es un espacio disponible para la clientela de proximidad. “Harpazul está moi ben e agora vai estar mellor porque se vai poder disfrutar os 365 días do ano”, apunta la empresa.