El gobierno de Moraña aprobó este jueves el proyecto técnico de la segunda fase del campo de fútbol de Mirallos, que cuenta con un presupuesto de más de 390.000 euros, financiados al amparo del Plan +Provincia de la Diputación. Lo hizo entre las críticas de la oposición sobre la gestión del ejecutivo local, al que socialistas y nacionalistas responsabilizaron de los atrasos y el sobrecoste del proyecto, cuyo presupuesto inicial rondaba los 500.000 euros y se ha disparado hasta cerca del millón de euros.
Una de las acusaciones reiteradas de la oposición al ejecutivo popular fue que no se haya dotado al proyecto del campo de Mirallos de una pista de atletismo, un gimnasio y vestuarios completos, un compromiso adquirido por los antiguos gobiernos populares. En este sentido, el alcalde, Sito Gómez, avanzó la intención del Concello de cumplir estas promesas: “Farase realidade nun novo proxecto”, señaló el regidor, que anunció que ya comunicó esta decisión a la comunidad deportiva del municipio. “Démoslle tempo ao tempo”, señaló.
Asimismo, subrayó que con esta segunda fase “este culebrón esta tomando a recta final” y que se espera que la modernización de las instalaciones estén listas para la temporada 2024/2025. Una previsión que no compartió el portavoz socialista, Xoel Souto, que pidió al gobierno “que non siga dando datas, porque as incumpre todas” y exigió que “asuman as responsabilidades”. En esta línea, lamentó que el ejecutivo prometiera que “non iba a costar nin un euro aos veciños” el proyecto del campo de fútbol y que ya lleven más de 70.000 euros de las arcas municipales gastados.
Por su parte, el portavoz nacionalista, Marcos Suárez, criticó la “nefasta xestión” del gobierno que lleva a que “desde o 2020 levamos sen campo de fútbol en Mirallos”, señaló. Además, pidió que el Concello explique las labores de mantenimiento que van a destinar a las instalaciones, señalando el estado actual de las pistas de pádel y definió de “promesas electoralistas” la dotación de un gimnasio y una pista de atletismo.
Cabe señalar que desde el año 2019 el proyecto sufrió numerosos atrasos por la quiebra de la primera empresa y los problemas con los precios y con la suministración de materiales por la guerra de Ucrania.
Por otra parte, la Corporación aprobó por unanimidad una prórroga de 12 meses en el contrato de Servizo de Axuda ao Fogar (SAF) para Eulen Servicios Sociosanitarios por un montante de 515.463 euros.