El Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 3 de Pontevedra acaba de dictar una sentencia por la que obliga al Concello de Vilagarcía a conceder licencia a un campamento de cabañas en Bamio, así como a revocar una resolución, en sentido contrario, dictada el 13 de abril de 2023.
Los promotores de este proyecto, que se pretende poner en marcha en una reagrupación de fincas en Rúa Os Lombos, cuentan con todos los informes sectoriales favorables y realizaron, durante años, adaptaciones solicitadas por el Concello de Vilagarcía y, en concreto, por el departamento de Urbanismo. Finalmente, tuvieron que ir a juicio, consiguiendo sus pretensiones al menos en primera instancia.
La superficie sobre la que se proyecta el campamento, que tiene previstas tres cabañas, cuenta con un total de 5.989 metros cuadrados. En su demanda, la empresa promotora, Cabañas Arousa Natura SL, señala que el proyecto básico contempla todos los aspectos relacionados con la seguridad, así como que “cumple con todo lo preceptuado para la licencia de un campamento turístico de una estrella con tres construcciones estables”, y que “se dio cumplimiento a todos los requerimientos del Concello demandado”. De hecho, en un primer momento el proyecto era de 7 cabañas, reduciéndose a tres para facilitar la concesión de licencia. La firma incluso llegó a presentar otro proyecto sin cabañas, con tiendas de campaña, que también fue rechazado por la administración municipal.
En realidad, y aunque los trámites juzgados en el Contencioso se remontan a 2022, los promotores comenzaron dos años antes con sus planes para un proyecto turística en una finca de herencia familiar, que ampliaron mediante compras, hasta reagrupar un total de seis parcelas.
Están los terrenos sobre suelo rústico sin especial protección, entre las dos carreteras que cruzan Bamio, en la zona de Vilar, con vistas privilegiadas a la Ría y al Ulla. El primer trámite que consta en la sentencia es de marzo de 2022, cuando solicitan licencia en el Concello.
Reciben el primer varapalo, con un informe del técnico municipal de Urbanismo en el que se establece que el proyecto incumple lo establecido en el artículo 6.3 del Decreto 159/2019, ya que “en ningún caso se establece la existencia de cocina en las instalaciones estables”.
El segundo motivo por el que se deniega la licencia es que “no se tiene por justificado la idoneidad de la localización elegida y la imposibilidad o inconveniencia de situar las edificaciones en suelo con cualificación idónea, en el presente caso en los suelos de núcleo rural delimitados en el PXOM vigente”.
Cabe destacar, a este respecto, que el decreto al que hace referencia el técnico municipal fue publicado por la entonces (2019) denominada Consellería de Cultura e Turismo, de la Xunta de Galicia. Al escrito de Urbanismo responden los promotores aportando un nuevo informe, precisamente, de la Axencia de Turismo de Galicia. El organismo autonómico avala el proyecto de Cabañas de Arousa y señala que “un bungaló o móvil home puede disponer de cocina o carecer de ella y seguirá teniendo esa consideración de instalación estable destinada al alojamiento temporal, perfectamente autorizada por Turismo de Galicia, siempre que se cumplan el resto de requisitos”.
Sobre el segundo “incumplimiento” que señala el técnico municipal, el arquitecto del proyecto detalla y especifica que los terrenos se ajustan a la normativa y que la idoneidad se justifica al ser “la única propiedad de la que dispone la sociedad”, así como que la parcela, al estar en una zona adyacente al núcleo de Vilar, “permitiría conjugar a los futuros usuarios la proximidad a los sercicios propios de suelo transformado (restaurante, biblioteca”, a la vez que están en “enclave rústico, en pleno contacto con el espacio natural, en un entorno privilegiado por su tranquilidad y belleza” que, señalan no se vería degradado”.
La nueva respuesta del técnico municipal mantiene su postura, tanto sobre la falta de cocina (pese al informe de Turismo) y sobre la justificación de la idoneidad, ante lo que apunta a “nuestra sensación de que lo que se pretende es un uso propio de esta clase de suelo y no el ofrecimiento de un lugar en el que alejarse precisamente de la ciudad para disfrutar del campo de una forma natural o integrada en la naturaleza”. La sentencia estima el recurso al entender que el proyecto cumple con la normativa y los informes sectoriales son favorables y que el decreto de Turismo no exige cocina. Considera la jueza que la denegación “carece de motivación”, vulnerando las garantías del procedimiento. Condena en costas (400 euros) al Concello, que puede recurrir.
Los denunciantes se plantean pedir una indemnización tras perder 200.000 euros |
Los demandantes llevan más de tres años luchando para poder sacar adelante su proyecto. La sensación de inseguridad y sorpresa que les causaban todos y cada uno de los rechazos que llegaban desde la administración municipal encuentran ahora un lugar de reposo en una sentencia que les da la razón, aunque el camino todavía podría prolongarse. De lo que no cabe duda es que, además de las preocupaciones generadas, lo que perdieron también durante este tiempo es poder adquisitivo. Y es que al que tuvieron que gastar para la contratación de abogados, se suma la subvención de 200.000 euros que les fue concedida para la puesta en marcha del proyecto, y que perdieron al no poder ejecutarlo por las resoluciones contrarias del Concello. Ahora, no descartan pedir una indemnización, que también tenga en cuenta el retraso que tuvieron en la puesta en marcha del campamento, pero para ello tendrían que iniciar otro procedimiento judicial, ya que en este solo se debatía la concesión de la licencia. El proyecto de Cabañas Arousa Natura se prevé sobre una superficie de 5.989 metros cuadrados. Son tres las instalaciones planeadas, que contarán con baño, sala de estar, dormitorio y una terraza. La zona de acampada está formada por tres parcela y el área verde suma 4.075 metros cuadrados. Además, el espacio verde suma 4.075 metros cuadrados. Según se recoge en el proyecto básico, las tres instalaciones tipo bungaló o cabaña contarán con conexión de suministro eléctrico. El campamento tendrá una edificación para los usos comunes necesarios para unas instalaciones de una estrella, que contarán con una capacidad para quince personas. Las cabañas son móviles y desmontables, situadas entre los robles existentes, manteniéndose la totalidad de los árboles. Habrá también una tienda, lavandería e iluminación nocturna |