El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia acaba de confirmar penas de entre cuatro y ocho años de prisión para tres vilagarcianos que fueron pillados llevando cocaína a Avilés y que guardaban en su vivienda 1,3 millones de euros distribuidos en billetes de diferentes cantidades.
Los hechos se remontan a 2021, cuando tras diversas investigaciones llevadas a cao por el grupo II de la Udyco de Pontevedra de la Policía Nacional y de la EDOA de la Guardia Civil así como la ETPJ de Cangas y el Grupo de Estupefacientes de la Comisaría de Gijón, comenzó el seguimiento a un grupo formado por tres vilagarcianos y un vecino de Avilés, tras comprobar varios encuentros para el intercambio de cocaína.
El 6 de julio de 2021 los arousanos llevaron una bolsa de color marrón que contenía cocaína a Avilés, donde debían entregarla a terceros. Una de las condenadas era la lanzadera, para comprobar si había controles policiales, con un margen de ventaja de entre diez y quince minutos. Los dos vehículos fueron seguidos, en todo momento, por agentes de la Policía Nacional.
Fueron detenidos mientras se encontraban en una cafetería y en el registro del vehículo los policías localizaron dos paquetes envueltos en papel film en sendas bolsas de plástico cerradas, que resultaron ser 2030 gramos de cocaína con una pureza del 81,9 por ciento y un valor en el mercado ilícito de 222.784, 38 euros.
Pero fue en el registro del domicilio de uno de los vilagarcianos cuando saltó la sorpresa. Y es que además de diversos móviles, tablets y portátiles, de libretas con anotaciones manuscritos y una envasadora en vacío, en la casa había una máquina de contar dinero. Hacía falta, realmente, ya que escondidos entre las tres plantas de la casa por 1.3 millones.
En el salón, encima de una mesa, había dinero en efectivo en fajos, distribuidos en 12 billetes de 500 euros, 13 de cien, 193 de 50, 132 de 20, 27 de 10 y un billete de cinco, así como un fajo de 168 billetes de 50 euros. En la tercera planta, tirados en el suelo en bolsas, había 29 billetes de 500 euros, siete de doscientos, 180 de cien, 4.628 de 50, 854 de veinte, 462 de diez y 252 billetes de cinco.
La búsqueda no termina ahí. En un baúl de color negro se encontraron envasados al vacío un billete de 500 euros, ocho de 200, 188 de cien euros, 20.199 billetes de 50 euros, 1.330 de veinte euros, 212 billetes de 10 euros y seis billetes de cinco euros.
El recuento final de los billetes arrojó un total de 1.366.065 euros, provenientes del tráfico de estupefacientes, según considera probado la sentencia que señala que la compra del vehículo que utilizaban para el transporte de droga fue también adquirido con la venta de estupefacientes.
Por todo ello, la sección cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra condenó a los cuatro acusados a penas que van entre los cuatro y ocho años de prisión y multas entre 200.000 y 700.000 euros, siendo la mayor condena para el vilagarciano en cuyo domicilio se encontró el dinero.
Las defensas recurrieron alegando, entre otros motivos, que se había vulnerado el derecho a la inviolabilidad del domicilio y el derecho a un proceso con todas las garantías, argumentando que la investigación policial fue aportada el mismo día que se incautó la droga. Sin embargo, quedó demostrado que el seguimiento policial ya se constata desde marzo de 2016, cinco años antes del registro. Por ello, el TSXG ratifica la sentencia.