Uno de los nueve socorristas seleccionados para vigilar las playas este verano en Vilagarcía presentó hoy mismo su renuncia, por lo que el gobierno local decidió limitar la vigilancia a los arenales con bandera azul, es decir, A Compostela y O Campanario.

Vilagarcía había solicitado doce socorristas, pero no se llegó a cubrir la oferta. En la primera convocatoria se lograron contratar siete y en la segunda dos, pero con la renuncia se quedan en ocho.

Ante este cúmulo de circunstancias y a la vista de la normativa de las banderas, el ejecutivo socialista, de acuerdo con los técnicos de Protección Civil, decidió priorizar A Compostela y Campanario. A la primera se adscribieron cinco socorristas, de tal forma que atenderán el servicio en turnos de tres o cuatro. A la de Bamio, se destinarán los otros tres, que trabajarán en turnos de dos.

Las ocho horas de atención al público estarán en vigor desde el próximo lunes, 1 de julio, hasta el 15 de septiembre, incluidos sábados, domingos y festivos.

Críticas

Esta situación es, para el Partido Popular, fruto de la "mala gestión", del gobierno socialista. Para la principal formación de la oposición la "excusa" de la falta de profesional es "falsa" y señalan que Sanxenxo contrató a 83 vigilantes y otros municipios como Baiona y Nigrán cubrieron las 36 plazas. 

"Hay 3.800 socorristas inscritos en el registro gallego, más que nunca, pero si queremos que los profesionales escojan Vilagarcía tenemos que ofertar unas buenas condiciones laborales y tener previsión, realizando las pruebas con tiempo y antes que los otros concellos y no con el verano ya encima", señala la portavoz del PP, Ana Granja.

La formación señala que la "mala planificación" es recurrente. "Si todos los años les cuesta contratar socorristas, deberían estar promocionando cursos, formando profesionales y aumentando así la oferta", apuntan. Granja considera que es una "vergüenza" que el gobierno local "asuma" esta situación y "deje de intentarlo" ya que "tendrían que estar buscando socorristas por toda la comunidad".

Además, los conservadores consideran que el gobierno de Vilagarcía deja "en evidencia" a la ciudad. "Sanxenxo y O Grove cubriendo sus plazas y nosotros, la capital de la comarca, no somos capaces ni de contratar a doce", apuntan los conservadores.

Los populares lamentan que esta situación afecte sobre todo a la playa de O Preguntoriro, que perdió hace cuatro años la bandera azul "por la desidia del gobierno de Alberto Varela", lo que ven como un "nuevo desprecio" para el arenal vilaxoanés.