Arousa sigue recibiendo malas noticias a nivel poblacional, al acumular ya mucho años de crisis y pérdida de habitantes que en los últimos tiempos ha sido acuciante en el rural pero que también se constata en las zonas urbanas. Un ejemplo de ello es el caso de la capital arousana, Vilagarcía, que cuando empezó 2024 contaba con 37.831 habitantes y tan solo seis meses después –según los datos que maneja el IG–, la urbe acusó la pérdida de 41 vecinos, registrando una población total de 37.790 personas. Una circunstancia que contrasta con el crecimiento de las nueve principales ciudades gallegas, con datos muy positivos de crecimiento poblacional, superando algunas de ellas cifras históricas como A Coruña, pasando de los 250.000 habitantes, Santiago los 100.000 o Ferrol los 65.000.
No obstante, cabe subrayar que la capital arousana sí mejora los datos de población que manejaba en el anterior mes de julio, en 2023, cuando se contabilizaban 37.728 personas empadronadas. Las cifras de referencia del IGE se basan en el censo de población, entre otras estadísticas, aunque sí permiten hacer una radiografía de la situación poblacional, mientras que los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) son oficiales y consolidados del padrón municipal.
De todos modos, las cifras manejadas por el Instituto Galego de Estadística muestran la tendencia general que atraviesa la Ría en los últimos años, con población en detrimento y un rural que agoniza, aunque con excepciones como Catoira o Moraña que, sorprendentemente, es el municipio que más aumenta su población, con 131 habitantes más que en enero de 2024, según las estimaciones del IGE.
A ellos se suman Cambados (18 empadronados más hasta un total de 13.852), O Grove (suma 53 hasta los 10.939) y Sanxenxo (que con 17.916 aumenta la cifra en 18 vecinos y que en noviembre, según anunció el Concello, superó la barrera de los 18.000 habitantes en el padrón municipal) como únicos concellos de O Salnés, O Barbanza y Ulla-Umia en registrar un incremento demográfico.
Lo cierto es que todas las comarcas pierden población, siendo la más preocupante O Barbanza, que contabiliza una disminución de cerca de medio millar de personas, pasando de los 65.958 habitantes a principio de año a los actuales —con datos de julio— de 65.510, un descenso generalizado que se percibe en la totalidad de los municipios que componen la comarca, desde Rianxo a A Pobra, Boiro y Ribeira, que es el concello que más población pierde en Arousa con un centenar menos de empadronados, según los datos del IGE. De 27.030 pasa ahora a 26.885.
37.790 personas
Pese a que Vilagarcía aumenta sus habitantes con respecto a julio de 2023, pierde 41 vecinos desde enero de 2024.
Lo mismo sucede en O Salnés, donde se ha bajado en residentes. Los datos poblacionales de enero de 2024 reflejaban 110.720 habitantes frente a los 110.531 de julio, siendo los concellos con una sangría poblacional más evidente A Illa, Ribadumia y Meaño, mientras que O Grove, Sanxenxo y Cambados son los únicos que registran un pequeño repunte.
Curiosamente, la comarca arousana que tradicionalmente más ha sufrido la pérdida de población, Ulla-Umia, es la que registra, en este caso, los datos más positivos, al preverse apenas ochenta residentes menos. Cuntis, sin embargo, contabiliza una pronunciada pérdida de un centenar de habitantes, Portas de 66 y Caldas de 45, lo que hace a la villa termal situarse por debajo de los 9.600 vecinos, una cifra de la que no bajaba desde el año 2004. Por su parte, Valga mantiene estable su población, con un mínimo descenso de cuatro habitantes y Catoira y Moraña son los únicos municipios en aumentar sus números. Cabe señalar que la fijación de población en los concellos es uno de los principales objetivos de los gobiernos locales en Ulla-Umia, tras años de sangría demográfica en una comarca mayoritariamente rural y envejecida.
En este sentido, uno de los grandes desafíos de los municipios es el relevo generacional. El envejecimiento de la población es una tendencia que se registra desde hace años tanto a nivel estatal como, todavía de forma más acentuada, en Galicia y de la que no escapa Arousa. Así, según los datos del IGE ningún concello de la Ría y su entorno supera el 20% de población con 19 años o menos. Solamente Ribadumia, con un 19,06% se acerca a esta marca recomendada, potenciada por el crecimiento de lugares como Barrantes cuya expansión inmobiliaria atrae en los últimos años a residentes en municipios cercanos. Del resto de localidades, solo Ribeira, con 4.661 habitantes menores de edad, y Cambados, con 1.471 jóvenes menores de 19 años, superan la marca del 17% de la población.
Ulla-Umia registra los peores datos de envejecimiento y solo Ribadumia se acerca al 20% de menores de 19 años
Por contrario, Cuntis, con apenas un 12,56%, es el concello arousano con menos población joven. A la villa termal la siguen Portas, con un 14,37%, Meis, A Pobra do Caramiñal, Rianco y Catoira, todos por debajo de la barrera del 15%, situándose el resto en la franja del 15 al 17%.
En cuanto a la población envejecida, se da la situación contraria y Cuntis es quien lidera la cantidad de habitantes mayores de 85%, que en el caso del concello alcanza el 6,46% de su población total. La sigue de cerca Portas, con un 6,37%, con un claro predominio del rural. También contabilizan cifras altas A Pobra (5,11%), Rianxo (con un 5,04%), Meis (5,02%) o Valga (4,93%).