La playa de Paxariñas lucirá su bandera azul este verano. De ello está convencida tanto la alcaldesa como el concejal de Medio Ambiente, que ayer supervisaron el inicio de los trabajos de seguridad sobre el talud que se desprendió el pasado invierno.
Estaba prevista la visita de la jefa provincial de Costas, Cristina de Paz Curbera. Sin embargo, los plazos marcados en la Ley Electoral impidieron su presencia en el arenal. Por ello, fue Catalina González la que adelantó que la obra que ya se está ejecutando en Paxariñas, y que cuenta con una inversión cercana al medio millón de euros, se trata de una primera fase de un proyecto más ambicioso.
La alcaldesa no desveló más detalles, pero sí adelantó que el Concello negocia con Costas la ampliación del proyecto para que “el entorno de Paxariñas pueda ofrecer mejor aspecto y mejor servicio a todos los usuarios”.
Sin embargo, tanto Catalina González como José Luis Rodríguez coincidieron en destacar que el objetivo principal en estos momentos es concluir los trabajos en el plazo de dos meses que Costas ha dado a la empresa adjudicataria y que consisten en la contención de las laderas con una malla con espárragos metálicos, que garantizan una mejor sujección de la pared de piedra.
El fuerte oleaje que se produce en esta playa durante los meses de invierno en los que se concentran los temporales convertía en peligroso el talud, desde el que se venían repitiendo desprendimientos progresivos.
El inicio de la obra ha permitido ya retirar la valla con la que el pasado verano fueron conviviendo los bañistas. Pero José Luis Rodríguez, edil de Medio Ambiente, quiere ver ondear la bandera azul.
Para ello cuenta ya con el compromiso de la Adeac, siempre que las obras estén acabadas. Y si no aparecen inconvenientes que las retrasen, deberían estar lista sobre el 15 de junio.
Ayer, Catalina González, además de reconocer la sensibilidad de Costas para llevar a cabo esta actuación, quiso agradecer públicamente la colaboración recibida por parte de los propietarios de las fincas por las que acceden las máquinas a la arena
En a lanzada
Costas tiene ahora pendiente otra actuación, incluida en el programa de reparación de daños causados por el temporal. Se trata de los surcos y socavones situados en A Lanzada, muy cerca de la ermita.
Ayer, Catalina González confirmó que los trabajos están pendientes de una autorización que debe conceder Patrimonio. La comisión se celebrará el próximo día 5 y la alcaldesa cuenta con que sea favorable.
“Allí el problema es distinto. Lo que hay que hacer es instalar una canaleta que recoja las aguas dulces, de la lluvia. El terreno en aquella zona es esponjoso y hace que el firme se vaya deshaciendo”. Con todo, Catalina González confía en que el entorno de la ermita pueda estar también en perfecto estado de cara al inicio de la temporada estival. Para hacerlo cuentan ya con el permiso de los propietarios, los comuneros de Noalla.