La Audiencia Nacional ha ratificado las penas de entre cinco y trece años de prisión para los acusados de formar parte de una red de tráfico de drogas internacional, que traía heroína desde los Balcanes a O Salnés, para distribuirla a través de la comarca arousana por España y Portugal.
La banda, formada por ciudadanos de nacionalidad búlgara, turca y española, operaba con sede en Madrid, donde tenía un conocido establecimiento hostelero desde el que coordinaban las operaciones de introducción de droga, y se desplazaban a O Salnés, tanto a Vilagarcía como a Vilanova, para preparar los operativos.
En Vilanova, en concreto en la parroquia de Caleiro, se encontraba el chalet en el que los agentes del Greco de la Policía Nacional encontraron 27 kilos de heroína. Su propietario era un vecino de la localidad que nació en Bélgica pero tenía la nacionalidad española. El resto de la droga fue localizada en registros de domiciliarios y de vehículos, sumando un total de 37 kilos, uno de los alijos de esta droga más importante desarticulados en O Salnés.
De hecho, la sentencia de la Audiencia Nacional recoge que el valor de esta cantidad de estupefacientes en el mercado negro asciende a más de nueve millones de euros.
La policía les seguía los pasos
Aunque la operación se desató en 2018, los preparativos se remontan a finales de 2017, cuando los cabecillas de la red internacional, ciudadanos turcos, comenzaron a reunirse en Madrid para preparar un envío de Turquía a España, utilizando la estructura que conformaban. Uno de ellos acababa de llegar a la capital española procedente de Sofía, precisamente para participar en estas reuniones.
Elm primer encuentro se produjo en el bar del cabecilla, mientras que el siguiente, solo seis días después, tuvo como escenario otro establecimiento hostelero madrileño, desde donde dos de los narcotraficantes se desplazan a Sevilla para coger un coche y reunirse con otros dos contactos, no identificados por los investigadores, que les seguían los pasos en todo momento. Mientras que dos de ellos se desplazan en coche a Bulgaria otros dos hacen lo mismo por vía aérea y allí siguen con los preparativos del alijo. Regresan a Madrid en la última semana de enero de 2018 y ya de inmediato ponen rumbo a O Salnés. En Vilanova, realizan otra reunión en un bar y al día siguiente aún tiene lugar otro encuentro en un aparcamiento de As Carolinas, ya en Vilagarcía. Es precisamente después de estos movimientos cuando se desencadena el operativo policial, que acaba con la detención de los diez condenados y la incautación de la droga, vehículos de alta gama, más de 28.000 euros en metálico y una pistola detonadora con munición.
Los acusados fueron condenados por la Audiencia Nacional a penas que suman 62 años de cárcel, pero recurrieron alegando diversos argumentos, que fueron rechazados, uno por uno, por la Sala de Apelación. Su última opción es la casación.