Los cierres perimetrales y estar sumergidos en plena tercera ola de la pandemia ha motivado que la celebración de San Valentín en Arousa tuviese este año un matiz un poco distinto. Flores y bombones volvieron a ser los regalos estrella y, de hecho, muchas floristerías optaron por abrir ayer por la mañana para ofrecer producto fresco a su clientela. Sin embargo este año fueron algunos los que quisieron mostrar otro tipo de amor, más allá del tradicional, y motivados por una situación de restricciones sin precedentes.
Es el caso, por ejemplo, de la agrupación de Protección Civil de Vilagarcía. Lo suyo es amor por la ciudad y por eso han querido aprovechar la celebración de San Valentín -o Día de los Enamorados- para elaborar un pequeño vídeo en el que proclaman su amor por la ciudad y en la que, sobre todo, piden “sentidiño” en plena tercera ola de la pandemia. Y es que ellos han sido durante todos estos meses uno de los sectores que ha vivido en primera línea la lucha contra el coronavirus con los traslados en la ambulancia o la desinfección en las calles y centros públicos.
Lo que está claro es que si las Navidades y otras fechas señaladas han estado marcadas por la crisis sanitaria del coronavirus en San Valentín no iba a suceder algo diferente. Con el Entroido totalmente olvidado y rezagado a las redes, a lo “on line” y a las fiestas en los colegios la cita dedicada al amor en todas sus versiones también ha querido rendir un homenaje a los que salvan vidas en los hospitales y las UCI. Al menos esa es la idea en la que se basó el establecimiento Arosa Casa para decorar un escaparate que no deja indiferente a nadie que se pasee por la zona de San Roque. Inspirándose en una escena de la película “La isla encantada” de 1947 -como ellos mismos aclaran- quisieron dedicar el Día de San Valentín a los “que siempre están: Los médicos y sanitarios”.Otra forma de agradecer su trabajo en tiempos difíciles y de mucha lucha.