Agentes de la Guardia Civil de Boiro detuvieron el pasado viernes en A Pobra a tres personas en una operación antidroga que se desarrolló en el casco urbano de dicha localidad. Ese fue el resultado de las investigaciones llevadas a cabo en los últimos tiempos por parte de efectivos de la Benemérita en relación a la existencia de un punto negro de venta de sustancias estupefacientes, al que acudían con frecuencia un importante número de toxicómanos, y que está situado en el entorno de la iglesia parroquial de Santa María A Antiga do Caramiñal y de la Rúa San Roque.
Según comentaron algunos residentes de la zona en donde se ubican esos supuestos puntos de venta de drogas, había bastantes quejas por esa presunta actividad delictiva y que, fruto de ello, desde el instituto armado se empezó a llevar a cabo un control y seguimiento de esa situación. Tras la obtención de los indicios suficientes sobre las sospechas que había de esa actividad ilegal, la Guardia Civil obtuvo la autorización judicial para llevar a cabo las entradas y registros en dos domicilios situados en la referida céntrica zona de la villa pobrense, y que se llevaron a cabo en el transcurso de la mañana del pasado viernes con la intervención de varios efectivos policiales -algunos de paisano y otros uniformados- y la comitiva judicial.
Fruto de esos dos registros que se practicaron y a la espera de que la Benemérita haga oficial los detalles del resultado de dicho operativo, ha trascendido que se incautaron sustancias ilegales como cocaína y heroína, así como una cantidad de dinero que, entre los dos domicilios inspeccionados, supera los 6.000 euros, además de otros efectos para la manipulación de la droga. Por ello, los agentes del cuartel boirenses procedieron a la detención de los dos miembros de una joven pareja, que viven en uno de los domicilios registrados, y a un hombre de mediana edad y que reside en el otro inmueble inspeccionado y que es un viejo conocido de las fuerzas del orden, y fueron trasladados a los calabozos del puesto principal de Boiro.
Los tres detenidos se acogieron a su derecho a no declarar en el cuartel y seguidamente el titular del Juzgado de Instrucción Número 1 de Ribeira dio órdenes a última hora del viernes para que fueran puestos en libertad con cargos, sin pasar por la sede judicial, a al que serán citados para declarar durante el periodo de instrucción de esta causa.