El gobierno local de Vilagarcía acaba de dirigirse, de nuevo, a la Xunta de Galicia, para que adopte una serie de medidas de mejora tanto en el firme como en las condiciones de seguridad en vías que son de su exclusiva competencia: La carretera vieja de Bamio, la Avenida Agustín Romero, Rosalía de Castro y Valentín Viqueira (ambas en O Carril).

Todas las peticiones, señalan fuentes municipales, están "amplamente apoiadas pola veciñanza, que constantemente se dirixen ao Concello advertindo da perigosidade deses viais". Cuentan, además, con un informe favorable de la Policía Local. Las tres carreteras que, en realidad, funcionan como calle, cuentan con una alta densidad de población a su alrededor.

Quejas vecinales

En el caso de Bamio, se trataría de renovar o al menos reparar el firme, que presenta numerosas deficiencias "depois de anos sen ningún tipo de investimento", señala Ravella. Además, piden habilitar medidas de calmado ed tráfico, mejorando la seguridad de los peatones. Sobre esto, hay una queja reiterada: El caso de la Rúa San Xoán 26, donde hay un paso de peatones al lado de una parada de bus muy utilizada, especialmente por escolares. Desde la propia Policía Local se defiende la idoneidad de dotar a este paso, junto a un cruce "en T", de regulación semafórica.

En el caso de O Carril, señalan desde el ejecutivo que preside Alberto Varela, sucede algo parecido. El Concello defiende, al igual que muchos vecinos, que los pasos de peatones de A Rosa (al final de la barandilla junto al mar), Valentín Viqueira (frente al Beiramar) y Rosalía de Castro (delante de Abanca) sean elevados, provocando así que los conductores se vean obligados a reducir la velocidad.

Por último, para Agustín Romero vuelven a reiterar, como ya hizo incluso el alcalde delante del presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, que "é preciso renovar e ampliar as beirarrúas, facer pasos elevados para peóns e instalar lombos de asno ou similares ao longo da Avenida, de xeito que sexa obrigatoria a circulación a menor velocidade".

El gobierno local tiene diseñado su propio plan de reductores de velocidad, a ejecutar antes de que concluya el año. En total, serán 19 las actuaciones, con una inversión de 48.000 euros, fundamentalmente en las áreas rurales y la Rúa Extramuros de O Carril, solucionando así, al mismo tiempo, el problema de carga y descarga del supermercado.