El jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, contestó este miércoles a las acusaciones de corrupción por parte de Alberto Núñez Feijóo asegurando que preside un Gobierno “limpio”, y pidió al líder del PP la dimisión de Carlos Mazón como presidente de la Generalitat Valenciana al considerarle el máximo responsable de la tragedia de la DANA.
Sánchez y Feijóo se lanzaron reproches por la gestión de la tragedia por parte de los gobiernos central y autonómico en el debate del pleno del Congreso en el que el presidente del Gobierno compareció para explicar la actuación ante esa catástrofe por parte de la administración central y que dijo que está suponiendo un esfuerzo “titánico”.
Un debate en el que Feijóo aprovechó por atacar al jefe del Gobierno por “casos de corrupción que llevan su nombre” y “cubrirse de toda la peste y mentiras que le rodean”. Ante esa acusación, Sánchez le reprochó que dé más credibilidad a “un delincuente confeso”, en alusión al empresario de la trama Koldo Víctor de Aldama, que a la Agencia Estatal de Meteorología por sus avisos en la DANA. Frente a ese ataque del líder del PP aseguró, además, que él preside un Gobierno “limpio”.
El principal contraataque de Sánchez fue por su actuación y la del presidente Mazón ante la DANA. Si en la intervención inicial de su comparecencia ya apuntó a Mazón por sus cambios de criterio en sus peticiones al Gobierno y dijo que había “personas en posiciones muy elevadas que no estuvieron a la altura de sus responsabilidades” y que tendrán que asumir su culpa, en la réplica a Feijóo ya le citó explícitamente.
Al pedir el líder del PP que el Gobierno declare la emergencia nacional y asuma el mando de la situación, Sánchez interpretó que cree que Mazón lo está haciendo mal y se preguntó por qué no le pide que dimita.
Tras recordar que los socialistas valencianos ofrecieron sus votos para ello, consideró que Mazón es el “principal responsable de esta catástrofe” y aseguró que ese Gobierno autonómico no supo gestionar “ni el antes, ni el durante ni el después de la DANA”.
Por eso, apoyó la destitución de Mazón e invitó a Feijóo a que la impulse para acabar también con una mayoría “negacionista” en las Cortes valencianas. La petición de dimisión la volvió a exigir poco después a Feijóo en la sesión de control.
Además, se dirigió al líder del PP para recordarle que dice indignarse porque el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, estuviese representando a España en la cumbre de biodiversidad de la ONU mientras no exigió aún a Mázon explicar dónde estuvo “esas cuatro horas en las que permaneció incomunicado” el día de la tragedia. Tras calificar esa actitud de hipocresía contrastó el “hermetismo absoluto” de Mazón.
Sánchez acusó al PP y a Vox de difundir bulos sobre la tragedia y de ser un peligro allá donde gobiernan, y reprochó a Feijóo “cargar la culpa en los justos” para librar a los pecadores.
Dijo, además, que los populares tienen un concepto muy patrimonialista del Estado que les hace pensar que tienen derecho a usar las instituciones en beneficio de sus familiares y de sus “amiguetes”. También acusó a Feijóo y al PP de codicia ante el hecho de que la primera decisión del Gobierno valenciano tras sustituir a varios de sus consejeros fuese eludir el límite salarial de los miembros de ese Ejecutivo.
Por su parte, Feijóo se ofreció a los socios de Sánchez para tumbar al Gobierno, recalcó que en la DANA falló la prevención, la alerta y la respuesta del Ejecutivo, y defendió que España no “merece un Gobierno que ante una catástrofe piensa más en el rédito político”.